Otro 'juguete' para Quique Setién. Alen Halilovic, un 'crack' más en la UD Las Palmas. El club amarillo suma a su sello de talento al croata, de 20 años, que aterriza hoy en Gran Canaria y en las próximas horas pasará el reconocimiento médico y será presentado. El ex de Barcelona y Sporting de Gijón se adapta a la perfección al estilo del equipo amarillo. Atesora una clase descomunal con la que puede formar una gran sociedad con otros socios de su mismo perfil como Jonathan Viera o Tana. Es un cromo de los que ya hay en el conjunto insular, o de los que hay algunos similares, pero para la filosofía de Quique Setién nunca sobran los jugadores de sus características.
Con esa mentalidad le ha incorporado el equipo amarillo. Halilovic, que no ha tenido en los últimos años a entrenadores que le permitan dar rienda suelta a su fútbol, aterriza con una cesión hasta final de temporada y una opción de compra en verano. A sus 20 años es una joya por pulir. El diamante ya dejó muestras de lo que puede llegar a ser en el Barcelona B, en Segunda División, y posteriormente en el Sporting de Gijón, ya en la máxima categoría.
Pero el curso pasado, con el 'Pitu' Abelardo en el banquillo, un técnico que apostaba por jugadores de más carácter y raza, efectivos que suden más en tareas defensivas o sean más veloces en ataque, solo pudo mostrar sus cualidades a cuentagotas. Se podía asociar con otros 'jugones' como Jony o Sanabria, pero el Sporting no iba sobrado de calidad del centro del campo hacia detrás y era uno de los equipos con menos posesión.
El curso anterior, en el Barcelona B, tuvo a Eusebio Sacristán como entrenador. Era un contexto mucho más cómodo para sus condiciones, pero la temporada no fue buena a nivel colectivo para el conjunto azulgrana, que acabó descendiendo a Segunda División B. Con compañeros como Sergi Samper, el grancanario Sandro Ramírez o Adama Traoré formó parte de un filial que decepcionó. El croata, sin embargo, era un asiduo de los entrenamientos con el primer equipo y llegó a debutar en Copa del Rey.
Había sido adquirido por unos dos millones de euros procedente del Dinamo de Zagreb, donde destacó a pesar de su juventud y fue una de las promesas más cotizadas del continente europeo.
Pero el 'niño maravilla' no ha hallado el ecosistema adecuado. Y es que en el Hamburgo, además de encontrarse con la barrera del idioma -su pasado en España ha sido uno de los aspectos que más valoró la UD a la hora de analizar su fichaje-, ha militado en un club en caída libre. El conjunto alemán, que llegó a cambiar de entrenador, está en puestos de promoción de descenso y no tiene norte. El equipo amarillo, mientras, tiene las ideas mucho más claras.
Aunque Halilovic no entra dentro de lo que demandaba Quique Setién cuando hablaba de profundidad y gol, el cántabro mostró su conformidad con el fichaje. Con su exquisita pierna zurda y regate, aunque pida el balón más al pie que al espacio, como suelen hacer también Jonathan Viera o Tana, es un jugador desequilibrante en el uno contra uno.
Esto hace que sea totalmente compatible con Hernán Toledo o Jesé Rodríguez, los otros extremos con los que negocia la UD Las Palmas. Su llegada, por su demarcación, puede reducir los minutos sobre el césped de Tana, El Zhar, Momo o Mateo García. Esta incorporación hace que el argentino, ante tanto posible refuerzo para las bandas, pueda salir cedido.
