Casimiro López era ayer uno de los más veteranos del lugar. Jubilado desde hace varios años, al término del multitudinario acto de presentación de Jesé Rodríguez, fichaje estrella de la UD Las Palmas en este mercado invernal, seguía mirando al frente, a esa escalera por donde minutos antes había desaparecido el nuevo '10' amarillo.
"Vengo con la misma ilusión que cualquier niño pequeño. Llevo más de 15 años como abonado, desde la época del Insular. Hemos sufrido mucho en estos años y ahora toca disfrutar", recuerda López, de pie en las últimas filas de la Tribuna. Ojiplático, aún no cree lo que acaba de ver: Jesé Rodríguez, con solo 23 años y la camiseta de la UD encima. "Es increíble. Fichajes así no te lo podías imaginar hace un par de años. Ha sido un éxito de la UD Las Palmas y de su directiva", apunta.
A Casimiro, uno de los espectadores del acto de ayer que por ley de vida acumula más fútbol en su memoria, le parece que el fichaje de Jesé "es de lo mejorcito" que ha hecho el cuadro amarillo en los últimos años sin olvidar que "todo tiene su valor" en su tiempo. "Primero Valerón, después Viera, luego Prince, ahora Jesé... Todos han sido ilusionantes y han respondido. Ahora a Jesé que lo aten en corto, que venga con ganas y que demuestre su fútbol que tiene muchísimo", aseguró.
Entre Casimiro López y Asier Muñoz no hay una ni dos generaciones intermedias, sino alguna que otra más. Si el primero hace ya varios años que se toma su merecido descanso, el segundo es un recién llegado a la Educación Primaria. Asier, con la segunda equipación de la UD, regalo de los últimos Reyes Magos; gorro y braga para el cuello a juego, tampoco sale de su asombro. "Tenía muchas ganas de venir a ver a Jesé. Me encanta la UD Las Palmas y me gusta mucho Jesé. Ha sido un día distinto y me ha hecho mucha ilusión ver a Jesé con la camiseta de Las Palmas", añade.
Asier Muñoz, que patea el balón en la cadena del Unión Viera, no esconde sus preferencias. "Los que más me gustan son Prince, Jonathan Viera y Lemos. Ahora también Jesé, que es un jugador muy bueno, que ojalá meta muchos goles y ayude al equipo a estar arriba", comenta con la boca pequeña, pero con un tono afable que contagia.
Unas filas más arriba, sin apenas voz está Encarna González, vecina del barrio de Los Giles. Esta semana faltó a su cita con el Estadio de Gran Canaria por motivo de fuerza mayor: un retraso en una conexión aérea. "Estuve una semana de vacaciones en Bruselas. Cambiamos los billetes para poder llegar a tiempo de ver el partido entre Las Palmas y el Valencia, porque intuíamos que podía ser un gran partido. Pero resulta que tuvimos tan mala suerte que en el aeropuerto de Barcelona había mucho tráfico aéreo y no pudimos aterrizar. Cuando lo hicimos, nuestro enlace para Gran Canaria ya había despegado", comenta.
Desde el aeropuerto
Algo que no fue un argumento suficiente para quedarse sin voz desde la terminal. Porque desde allí siguieron la victoria de la UD ante el Valencia y las últimas novedades de la noche que iban surgiendo con la contratación de Jesé Rodríguez. "Los canarios la montamos allí viendo a nuestros jugadores. Y hoy [ayer para el lector], directa a ver a Jesé, que sepa que lo acompañamos y que queremos que dé lo mejor que tenga", agrega González.
Ahora espera que el extremo grancanario pueda recuperar su mejor versión futbolística. "Me encanta como jugador. Espero que se motive y que fomente el compañerismo que hay", añade. El discurso ambicioso del futbolista, unido con su entrega en la presentación, hacen que Encarna González sea optimista con su rendimiento. "Si ha renunciado a tantas cosas, es que viene con ganas", apunta.
Entre los casi 9.000 asistentes al Gran Canaria, en su mayoría jóvenes y niños, también estaba Youssef Mouaci, de trece años, acompañado por su madre. "Me quedé con las ganas de que se acercara a firmar alguna camiseta, pero bueno... La verdad es que me ha hecho mucha ilusión el fichaje y que vaya a jugar estos meses en la UD Las Palmas", declara con sosiego.
En su mente, al igual que en el discurso que Jesé Rodríguez pronunció al graderío hay un sueño: ver a la UD Las Palmas paseando su fútbol por Europa. "Creo que Jesé va a ser muy importante si queremos estar el próximo año con los mejores", explica este joven vecino del barrio de Escaleritas e integrante de la cadena del Guiniguada.
Samuel Sánchez viene de un poco más lejos, desde Las Remudas. Su opinión no difiere demasiado de la del resto de asistentes al acto de presenteación de Jesé Rodríguez: es un refuerzo de lujo. "Si cumple con todo lo que ha dicho aquí, la UD dará un paso adelante. Ahora queda ver si eso va a a pasar", comenta, de un jugador de "muchísimo talento", que volverá a "un grande" pronto. "Si él se lo propone puede realzar su carrera aquí", concreta.
Ése es el deseo unísono de la afición amarilla. El primer paso ya está dado; Jesé es futbolista de la UD Las Palmas. Ahora le queda al extremo grancanario encontrarse a sí mismo en la Isla para avanzar con el conjunto amarillo y elevarlo a cotas de otro nivel.
