Radiografía a Jesé Rodríguez. Los registros de un galáctico en busca de su primer baño de gloria con la UD. Genio sediento de venganza. Ante Granada y Sevilla tuvo en sus botas dos ocasiones de oro. Era su ventana hacia la eternidad.
Presentado el 31 de enero, ante 8.000 almas en el Gran Canaria, el alta más galáctica en la historia de la UD, parece estar marcada por el infortunio en sus primeros 15 días de travesía en el universo de Setién. "Cuando marque el primero, será una máquina", aseguró el estratega, en la última rueda de prensa, tras el caer ante el Sevilla, en referencia al 10 del club isleño.
Dos batallas, 114 minutos, dos misiles a portería, cuatro remates, 30 pases, 78% de acierto en las entregas y 4,2 kilómetros completados en sus dos apariciones. Siempre por el costado izquierdo, el jugador diestro jugó de nueve puro unos minutos ante el ejército de Jorge Sampaoli.
El delantero y extremo grancanario, cedido por el PSG, protagonizó el pasado domingo su primera actuación de inicio (jugó 90 minutos). Su último encuentro íntegro se remonta al 14 de diciembre de 2016, con el PSG, en la Copa de la Liga de Francia ante el Lille.
Dos meses después, le llegó la alternativa más pasional. "Vengo a morir, me dejaré la vida", aseguró en su presentación. El guerrero total, ante 27.843 espectadores, firmó tres remates ante el campeón de la Liga Europa, dejó dos regates para la galería -una bicicleta a Mariano-, cinco centros al área y recuperó seis balones. En el minuto cinco y 34 segundos, tras un pase de Prince Boateng, el volcán de La Feria se quedó solo ante David Soria. El tiro cruzado fue desbaratado por el arquero internacional.
El desliz maldito le bailó en la cabeza durante el delicioso duelo ante el Sevilla. Ya le pasó ante el Granada, otro fotograma de pesadilla. A los tres minutos de pisar el césped en Los Cármenes, solo tenía que empujar el balón a la red. Con Ochoa ya superado, al ex del Real Madrid [94 encuentros, 18 goles] le faltó la inspiración divina. Se le fundieron los plomos. Su instinto asesino, el mismo que batió a Valdés, Guaita, Diego López o Beto, se topó con el felino Rico. Al arquero sevillista ya le batió en el Bernabéu, en el jardín privado de Big Flow.
Gen explosivo
Ante el bloque nazarí, firmó 23 minutos, un remate, un centro al área, recuperó tres balones, perdió seis esféricos y recibió una falta. Dejó sus credenciales de mimbre explosivo. Y se ganó el puesto de titular ante el Sevilla. El efecto Jesé dejó la mejor entrada del curso en el partenón de Siete Palmas [la segunda en la historia de la UD en Primera tras los 28.515 de enero de 2016 ante el Atlético de Madrid].
Mariano y Mercado padecieron las embestidas de la bestia amarilla, que se dejó el alma en cada balón. En su expediente ante el Sevilla: tres remates, dos regates, cinco centros al área, seis balones recuperados, 16 esféricos perdidos, una falta cometida y dos recibidas.
En plena fase de mejoría física, Jesé Rodríguez ya luce galones. Se trata de una figura de jerarquía en el vestuario ante el Málaga [lunes, 19.45 horas, Bein LaLiga, La Rosaleda], en su tercer choque, busca el estreno de artillero atómico.
Tridente de caviar sin pegada
Con el debut de Jesé, Setién ha dispuesto en el césped 114 minutos al volcán de La Feria, Jonathan Viera y Prince. Un frente ofensivo de lujo, que todavía no ha perforado la meta rival. Es la primera ocasión en la 2016-17 que los amarillos encadenan dos duelos sin marcar.
La última ocasión que la UD encadenó dos duelos sin anotar fue el 14 de febrero de 2016. Hace justo año, tras caer ante Rayo (2-0) y Sevilla (2-0). Los de Setién bailaban al filo del abismo pero encontraron el tesoro. Ahora, el rifle de Jesé busca su hueco en la historia.
