Las vidas del 'Gato' Romero empiezan a acabarse y el Málaga busca una victoria con la que poner punto final a la hemorragia. El conjunto blanquiazul, al igual que Las Palmas, acumula buenas sensaciones en los últimos partidos pero no terminan de transformarse en puntos. El entrenador uruguayo lleva al frente del Málaga desde el pasado mes de diciembre, tras la dimisión de Juande Ramos. En los seis partidos que ha dirigido ha sacado dos puntos. Un bagaje pobre aunque los malaguistas se aferran a las buenas sensaciones que ha ofrecido el equipo.
El 'Gato' ha implantado un sistema de 4-2-3-1 y parece que en los últimos partidos ha dado con la tecla. La portería es para Kameni, el veterano arquero le ha ganado la partida a Denys Boyko. En el centro de la zaga también ha apostado por un zaguero con experiencia como Demichelis, que fue una petición expresa suya en el mercado invernal. A su lado Luis Hernández y los laterales son para Rosales por la derecha y Miguel Torres o Juankar por la izquierda. En el centro del campo Camacho y José Rodríguez. Por delante Fornals, con Keko por la derecha y el Chory Castro por la izquierda se consolidan en el once. Y en la punta de ataque es Charles quien se ha hecho con el puesto ante la baja de Sandro Ramírez.
Mejoría en la defensa
La ausencia del grancanario la está notando el conjunto blanquiazul. Sandro Ramírez es el pichichi con siete tantos, aunque tendrá que estar otras dos semanas más en el dique seco. Con el nuevo técnico el Málaga ha ganado en consistencia defensiva, algo que le faltaba con Juande Ramos. Y ahora busca aprovechar las virtudes de sus jugadores, con velocidad y desborde por banda para llegar a la portería contraria. Esa es su principal virtud y la que están explotando en los últimos partidos.
El 'Gato' Romero que en su época de jugador era un mediocentro de los incansables, ha señalado que en el Málaga quiere implantar un "juego combinativo y con gusto". Pero la asimilación de nuevas ideas conlleva paciencia. Eso es lo que falta en Málaga. El conjunto blanquiazul necesita puntos para sellar la permanencia aunque desde su llegada el técnico se mostró optimista y señaló "tenemos que mirar para arriba y aspirar a Europa". Pero hasta el momento la dinámica no termina de ser positiva.
Un partido en el que contarán con el apoyo de su afición, que ha alcanzado los 23.000 abonados. Buscan desquitarse del mal sabor de boca que les dejó la pasada jornada el empate en Villareal, donde sufrieron los errores arbitrales.
