La oratoria del estratega de seda. Operación reconquista del corazón del fiel amarillo. Para triturar a la bestia de los 300 'kilos' de presupuesto, el cántabro apela al espíritu del partenón. Setién, que firmó 85 duelos con el Atlético, defiende la integridad del vestuario, tras la cruenta derrota en Butarque.

"La diferencia presupuestaria se tiene que notar; pero ya fuimos a su casa y conseguimos sacar un partido adelante [en la vuelta de octavos de Copa (2-3) en el Calderón]. El resto de partidos fueron muy dignos. Es un grandísimo rival", valora. Confía que ganen la Champions: "Ojalá se la lleven". Y defiende el libreto de Simeone: "Es un grandísimo profesional".

Desmiente que se estén arrastrando: "Los jugadores se comprometen al máximo; trabajan y corren. Habíamos cambiado algunas cosas para ser más agresivos y tener el balón (...) Es mentira que se hayan abandonado, los más afectados son ellos. Han sudado la camiseta hasta el final. No tengo dudas de su compromiso".

Un 'wasap' a los pesimistas

Con 15 puntos de margen con el descenso, y el segundo presupuesto más bajo de la competición, el entorno se ha vuelto pesimista. "He leído algunas cosas con respecto a lo que pasó el otro día que podía ser cesado. En el club todo el mundo tiene claro que estamos salvados con holgura. A mí el presidente [Miguel Ángel Ramírez], el otro día me trasladó que estaba encantado con el trabajo. Así como con el hecho de salvarnos con mucha antelación. Me trasladó que me había contratado para eso. Esta situación de derrotas no es fácil de digerir, pero no pierdo la perspectiva. En el caso del presidente no habló de que fuéramos a jugar en Europa; pero por encima de todo queda salvarnos sin apuros. Quizás ese premio no nos corresponda por presupuesto, nos tendría que haber costado más. Si lo llego a hacer al revés; igual no hubiera llegado a diciembre".

La obsesión del Valencia

El estratega de seda es el elegido por el cuadro 'ché' para el nuevo proyecto. Pero Setién se centra en la UD. Profesional íntegro hasta el fin de los días. "No tengo nada que comentar sobre eso".

Tilda de "barbaridad" los cinco partidos de castigo para Livaja. "No se los merece (...) Hemos visto acciones mucho más ofensivas sin sanción. Me parece desmesurado".

Y lanza otro mensaje: "Por encima de todo, está el escudo y la afición". Cuestionado por la dirección deportiva, su legado es eterno. Un sello poético que reta al Atlético.