Antes de entrar hay que dejar salir. Ese es uno de los tópicos en cada mercado veraniego. Las prioridades de muchos clubes, lo ideal, es primero encontrar un destino para los descartes y después, una vez conocido el dinero ingresado y los sueldos que se han quitado de encima, ajustar las cuentas con más precisión. Ocurre que no siempre es posible. Lo más difícil es hallar un equipo para un descarte y en condiciones favorables. Es lo que ha logrado la UD Las Palmas en el inicio de este mercado con Hélder Lopes y Marko Livaja. Dos de los señalados por el club para salir ya tienen equipo. Y es el AEK.

En la entidad están encantados con las dos operaciones. La de Hélder Lopes no ha supuesto coste alguno, y se trata de un jugador que el curso pasado jugó poco, y en la mayoría de las ocasiones mal. Para el portugués también ha sido un chollo, pues no ha visto reducido su sueldo y además va a disputar la Liga de Campeones. O al menos la previa.

La operación de Marko Livaja ha sido todavía más fructífera. Su sueldo roza el millón de euros y tras su rendimiento el curso pasado en el club veían muy difícil encontrarle un acomodo que no supusiera coste alguno. El croata no lo había puesto fácil. Sus cualidades son notables pero su carácter y su irregularidad son aspectos que suelen echar para atrás a cualquiera. A pesar de ello el negocio ha sido un éxito. Llegó sin traspaso a otro club -aunque hubo que pagar una cantidad económica a intermediarios- y se va cedido por un año al AEK, que paga casi 300.000 euros en concepto de cesión y todo su sueldo. Además, se guarda una opción de compra de casi tres millones de euros, y si la ejecuta el negocio ya sería redondo.

Media Segunda pendiente

Hélder y Livaja eran los que en el club creían que iba a ser más difícil colocar. Ahora quedan los a priori más sencillos. Y es que Tyronne ha completado una buena recta final de temporada en Segunda División con el Tenerife y Alfredo Ortuño realizó una gran temporada en la categoría de plata con el Cádiz. Los objetivos con ambos son distintos. Para el grancanario se busca otro préstamo y gustaría en la entidad que repitiera el Tenerife. El jugador espera por si encuentra algo en Primera, pero también ve con buenos ojos la opción de seguir en la isla vecina.

En el caso de Ortuño la intención es recuperar la inversión de alrededor de un millón de euros que se hizo por sus servicios, algo en teoría factible después de acabar como uno de los máximos artilleros de Segunda División. Muchos conjuntos de la categoría de plata se pelean por sus servicios. Así, el Cádiz quiere repetir, pero también ha sido relacionado con el Córdoba, el Tenerife y el Lugo. El punta quiere jugar en Primera y apurará sus opciones. En la UD prefieren evitar que haga la pretemporada pero puede que eso suceda si el atacante insiste en esperar alguna propuesta de la máxima categoría.

Segunda B

Con Javi Varas y Montoro, que acaban contrato, las otras salidas de las que se tienen que ocupar en los despachos son las de José Artiles (Cartagena desde enero), Leo Ramírez (Arandina) y Héctor Figueroa (Ponferradina). Los tres fueron cedidos este curso sin demasiado éxito a Segunda B y todavía tienen contrato.

En la entidad no cuentan con ninguno y la prioridad es minimizar gastos. Buscarán otra cesión o una rescisión lo más barata posible. De momento, la operación salida en la UD marcha bien.