David Simón no se rinde. A pesar de partir como teórico suplente de Míchel Macedo se ha empeñado en presentarle otro quebradero de cabeza a Manolo Márquez. Ha contado con ofertas de equipos de Primera y Segunda División este verano, pero ha preferido quedarse hasta el final y luchar por la titularidad. De momento, ha demostrado más que el brasileño.

La UD jugó mejor con él en el campo. Aunque el protagonismo total de la vuelta de la Copa Mahou frente al Tenerife fue para Jonathan Viera, que con un gol, una asistencia y el control total del juego volvió a demostrar que su talento es inagotable, Simón fue parte fundamental en la mejoría del equipo en la segunda parte.

"David Simón ha hecho un partidazo". Con esa frase, Márquez resumió la actuación del lateral grancanario. Con él, el equipo fue más "agresivo". El técnico, además, se desató en elogios hacia el jugador: "Es un chico que, juegue o no juegue, es una delicia tenerlo en la plantilla. Va a tener minutos si sigue así, es un ejemplo a seguir".

Gran estado de forma

Solventados ya sus problemas de espalda que tanto le lastraron la temporada pasada, Simón ha arrancado el nuevo curso en un estado de forma espectacular. Y sobre todo lo demostró ayer, en el derbi, en la que fue su mejor actuación en esta pretemporada.

Poco se le pudo ver en el apartado defensivo porque el Tenerife apenas llegó al área en la segunda mitad -lleva 10 días menos de preparación que la UD-. Y por eso se lanzó más al ataque.

Simón demostró que domina todas las facetas ofensivas que se le piden a un lateral. En la primera jugada casi llega a un balón interior enviado por Jonathan Viera. En la siguiente remató a puerta -paró Dani Hernández- tras un pase de Fabio. Luego le puso un balón en la cabeza a Jonathan Calleri. Más adelante realizó una internada y puso un balón atrás que no encontró rematador. E incluso estuvo a punto de recibir el regalo que Viera le puso a Calleri en el segundo gol. Si el argentino no llega a alcanzar el balón, ahí estaba él para para rematar la jugada.

Macedo, con fiebre

La explosión de David Simón coincide con la baja forma de Míchel Macedo, que aunque ayer demostró estar más fino, le está costando más ponerse a tono. Bien es cierto que ayer jugó con fiebre -lo confesó Márquez a la finalización del partido-, pero de momento ha demostrado estar muy por debajo de su rival en el lateral derecho.

La vida para Macedo cambió el lunes 6 de febrero en el partido en Granada (1-0). Allí sufrió una rotura del cuádriceps izquierdo que le tuvo más de un mes de baja. Desde entonces, no ha vuelto a ser el que era. Aunque su regreso a los terrenos de juego coincidió con el pésimo estado del equipo, nunca consiguió ser el futbolista explosivo que había dado cuatro asistencias de gol en la Liga.

Macedo fue la sensación de la pretemporada del curso pasado. Fichado del Almería, sorprendió a todos por su enorme capacidad física y por su perseverancia a la hora de atacar. Era el típico lateral brasileño. Sin ir más lejos, fue el autor del gol de la UD Las Palmas en el Heliodoro en la Copa Mahou del año pasado (1-1 y los amarillos perdieron en la tanda de penaltis).

Ofertas

Así las cosas, la pelota la tiene ahora Manolo Márquez, que deberá elegir a uno de los dos para jugar de titular frente al Valencia el próximo viernes 18. Para descubrir al ganador habrá que esperar. Lo que sí se sabe es que Simón ha contado y cuenta con ofertas del Leganés, del Levante y del Girona por si su primera opción, la UD, no le ofrece la oportunidad que a día de hoy merece. De momento, y salvo sorpresa, ha decidido quedarse.

El grancanario está empeñado en ganarse la confianza del entrenador y éste le agradece su actitud con minutos y elogios en la sala de prensa. El lateral derecho parecía tener dueño en Míchel Macedo. Ahora no tanto.