Experiencia internacional para el filial. Después de una temporada sabática, Ángel López regresa a la UD como ayudante de Suso Hernández. Cambia el césped, donde jugó 433 partidos oficiales -127 con el equipo amarillo y cinco con la selección española-, por el banquillo. Su sueño, "entrenar a la Unión Deportiva o donde sea", aunque prefiere ir paso en esta "etapa de formación".
"Primero tengo que descubrir si esto me gusta realmente. De momento me encanta, pero a lo mejor dentro de un año o dos no me veo entrenando", asegura el exfutbolista amarillo, que tiene claro que "todos los entrenadores de Primera División han sido segundos entrenadores en otros equipos".
Ángel, con experiencia en la Liga de Campeones con el Celta y el Villarreal, confiesa estar encantado con el nuevo grupo de futbolistas y con sus compañeros del cuerpo técnico.
"Lo primero que tenemos que intentar es que este equipo sea competitivo y que vayan todos a una", explica, y reconoce que "lo más normal en los filiales es que haya tres o cuatro que destaquen y hagan su partido", por lo que tienen -los técnicos- que "inculcarles que todos se necesitan".
De momento, se siente como pez en el agua. Se le ve feliz en los entrenamientos. Ha vuelto a recuperar la sonrisa. "Al final uno lo que hace es lo que hacía ya cuando era veterano, intentar ayudar a los jóvenes y corregir muchas cosas", afirma Ángel sobre su papel.
