Kevin Prince Boateng se ha explicado. Más allá del fútbol, para él prima su situación de equilibrio familiar. Es lo que se puede extraer de la rueda de prensa de despedida que ha dado el internacional ghanés después de rescindir su contrato con la UD Las Palmas. "Para mucha gente no es fácil de entender. Es una decisión responsabilidad mía, personal porque echo de menos a mi familia. Antes pensaba que era algo no muy fuerte, pero sí lo es. No es una decisión futbolística, es una decisión de padre y de esposo. La gente piensa que no esta lejos Milán de Las Palmas, que son solo cuatro horas, pero no es lejos de distancia, es lejos de emociones, de mi hijo, de mi mujer, de mi familia...", concretó el ya exfutbolista de la UD.

El emotivo vídeo de despedida de la UD Las Palmas a Prince Boateng

En su explicación, Prince insistió en esa misma idea. "Lo primero en la vida es la familia", comentó. Además, aseguró que fue hace "dos días" cuando le comentó su decisión final al presidente Miguel Ángel Ramírez, después de meditarlo durante las últimas semanas. "Son tres semanas donde pienso todos los días en ellos. Los jugadores me preguntaban qué me pasaba. Tengo muchas emociones dentro. Desde la semana pasada hablé con Miguel Ángel Ramírez y se lo digo: estoy muy mal. Echo de menos a mi familia, no estoy bien. El presidente es un 'loco', pero tiene un corazón grande. Lo llamé y le comento mis decisiones. Lo quiero, es como un padre para mí", agregó.

Por otro lado, Prince no cerró la puerta a un posible regreso a la UD Las Palmas en el futuro, a pesar de que cuenta ya con 30 años y que pondrá rumbo al Eintracht Frankfurt. "Tengo un presidente con el que he podido trabajar un año juntos muy bien. He prometido que quiero volver a jugar aquí. Es un gran equipo y es muy difícil irse. Me emociono porque hablo de mi familia, no de fútbol. Hablo de personas, de corazón. Aquí hay muchas personas buenas como Toni Cruz o como Luis Helguera y como mucha gente que trabaja aquí", añadió.

En referencia a que esta decisión se haya consumado a falta de dos días para el arranque de LaLiga, Prince insistió en su idea. "Las emociones no tienen tiempo. Pueden ser mañana, pasado, antes del partido. Cuando siento que no puedo jugar más llamo al presi, hace dos días pasados", contestó.

Pero por encima de todo, a Prime la UD le "ha dado mucho" dentro y fuera del campo. "Jugamos hasta los 34 o 35 años y ya está. Pero jugar aquí me llevo más que fútbol. Me llevo el sentimiento de familia. Hay personas que se ocupan del jugador, no solo un número. Eso me lo llevo para toda la vida", añadió.

Y para la afición solo cosas buenas, a pesar de que sabe que "algunos me odiarán". "Es una afición que desde el primer día me dio mucho. Desde el primer día. Hoy algunos me odiaran porque me voy, pero solo los puedo amar. La gente son locos, en el buen sentido. Es una afición que me gusta mucho", finalizó.

La UD y Boateng han sellado un acuerdo para rescindir el contrato que le ligaba a esta entidad para las próximas tres temporadas. Motivos personales de carácter irreversible provocan esta inesperada salida del club grancanario, que debuta el próximo viernes en Mestalla, desde las 21.15 horas, ante el Valencia. El futbolista ofrece una rueda de prensa para justificar los motivos en compañía del presidente Miguel Ángel Ramírez para despedirse de la afición. Eintracht de Frankfurt se postula como su destino.

Prince Boateng jugó en la UD Las Palmas. Tan solo una temporada pero el club amarillo pudo disfrutar de un jugador de alcance mundial. Y en sus mejores tiempos. El ghanés se marcha por sorpresa, después de renovar por tres temporadas y sin dejar dinero en las arcas del club pero con un rendimiento sobresaliente. Con diez goles, compromiso y seriedad resucitó en la UD y lideró un proyecto junto a Jonathan Viera que pasará a la historia por el liderato, un juego preciosista a las órdenes de Quique Setién y una salvación holgada a pesar de la calamitosa recta final.

Su fichaje colocó a la UD Las Palmas en el mapa del fútbol mundial. En una esfera que nunca antes había alcanzado. Un histórico del fútbol español ya había regresado a la élite después de muchos años y logró acabar en mitad de tabla, pero en un planeta tan repleto de galácticos y farándula hace falta mucho más que eso para hacer ruido. Y el movimiento de la UD con Prince Boateng lo consiguió. Conllevaba un riesgo enorme por un pasado con muchos capítulos polémicos. Pero se adaptó a la perfección desde el primer día, conectó con la afición y fue un ejemplo de comportamiento. Cumplió con lo que buscaba la UD: le dio rendimiento en el campo y un salto de calidad en el mercado.