Encontrar una solución para dotar a la Unión Deportiva Las Palmas de una de las palabras más usadas en el fútbol de hoy: equilibrio. Bajo ese credo trabaja Manolo Márquez, entrenador de la UD Las Palmas, que busca dar con la tecla que eleve las prestaciones de su equipo de cara a la visita a La Rosaleda del próximo lunes (20.00 horas, Gol TV).
Márquez, que ha echado el candado a las instalaciones de El Hornillo -ayer la sesión fue a puerta cerrada, como ocurrirá también en tres de los cuatro entrenamientos que restan de la semana-, quiere dar consistencia a su equipo y corregir dos principales problemas: el nivel defensivo de los suyos y el vigor del centro del campo. Todo para llegar a ese equilibrio deseado.
Las transiciones defensivas, un problema heredado desde los tiempos de Quique Setién en el banquillo de la UD Las Palmas, son uno de los mayores quebraderos de cabeza que tiene Manolo Márquez en la defensa. La UD se muestra endeble tras pérdida y por ahí han llegado muchas de las ocasiones concedidas durante la temporada y en los amistosos de preparación. Conseguir hilvanar una defensa más compacta pasa, para Márquez, por amarrar el centro del campo.
"Es un tema de ocupación racional de los espacios. Cuando el equipo juega bien, lo hace muy bien, pero cuando pierde el balón sufre muchísimo. El estilo del equipo puede ser el mismo, pero la ocupación será distinta. Me gusta jugar el balón. Entiendo que el 4-1-4-1 requiere más cosas, que la línea defensiva esté adelantada porque a los cuatro de delante les cuesta más volver y así corres muchísimos riesgos. No es un tema defensivo, es un tema de orden", aseguró Márquez hace unos días en una entrevista en este medio.
Una declaración de intenciones que no descarta la vuelta al doble pivote, el dibujo principal que utilizó la UD Las Palmas durante su pretemporada, con un futbolista de corte defensivo y otro más creativo. En ese esquema, el pundonor de Hernán Santana, pase lo que pase, parece tener un sitio asegurado para el partido de Málaga.
La lesión de Sergi Samper, llamado a ser el pivote único en el 4-1-4-1, puede variar los planes de Márquez para la visita a La Rosaleda y los partidos venideros. Las variantes se disparan a partir de ahí. En nómina, Márquez cuenta con Javi Castellano, Hernán Santana y Alberto Aquilani, retrasado en el aspecto físico, para el partido de Málaga. Una lista donde volverá a pulular Fabio González, centrocampista del filial, que debutó en la última jornada ante el Atlético de Madrid.
En la línea de mediapuntas, las alternativas se abren para Manolo Márquez. Y en esa parte también radica el balance defensivo que tanto anhela la UD Las Palmas. Porque ahí, con la recuperación de Vitolo y de Alen Halilovic, el panorama cambia por completo. Con Jonathan Viera -volvió ayer a entrenar tras perderse el primer entrenamiento semanal- y Vitolo con un puesto casi asegurado, serán Tana, Momo y el croata los que parten en la 'pole' para pelear por esos huecos.
Los retoques en la alineación de Las Palmas no pasan solo por ahí. Porque en el lateral derecho, Michel Macedo pide paso. El exfutbolista del Almería busca entrar en el once de Manolo Márquez, un lugar que aún no ha olido en la presente temporada. Su rigor defensivo es mayor que el de David Simón, notable en la pretemporada, pero dubitativo en este inicio de curso.
Y con todos esos posibles cambios sobre la mesa, a Manolo Márquez no se le va un concepto de la cabeza: el equilibrio. Un orden en el juego que de paso a una idea que aún está por descubrir en la UD Las Palmas 2017-2018. Después de dos partidos, las sensaciones y el rumbo del equipo no dejan paso al entusiasmo.
La Rosaleda, con un Málaga también de capa caída, con cero puntos en el casillero y un pulso abierto entre su entrenador, Michel González, y el propietario del club, Abdullah ben Nasser Al Thani, parece un buen lugar donde la UD pueda emprender otro rumbo. El calendario que viene resulta terrorífico: Athletic Club, Sevilla, Leganés, Barcelona, Celta, Villarreal... Una sucesión de partidos que podrían golpear en el corazón de la UD Las Palmas y la coraza de Márquez ante esa avalancha pasa por la defensa y el equilibrio.
