De cinco a diez. La UD Las Palmas ha cerrado el mercado de fichajes con nada más y nada menos que diez caras nuevas -una de ellas procedente del filial- en su plantilla, el doble de las planificadas al final de la temporada pasada. Un mercado con muchos más movimientos de los esperados y resuelto, sobre el papel, con mucho éxito. Los nombres de Vitolo, Rémy, Sergi Samper, Aquilani y Calleri, así como los primeros detalles de refuerzos como Chichizola o Ximo Navarro, y a la espera de los debuts de Tannane, Hernán Toledo y el propio Borja Herrera, dejan a la UD muy satisfecha con sus altas, si bien el mercado también está marcado por la salida de dos de los tres mejores jugadores de la temporada pasada: el faro (Roque Mesa) y el máximo artillero (Prince Boateng).
Para tapar esa sangría ha respondido la UD con inseguridad. Y es que el planteamiento inicial tras la salida del mediocentro teldense fue el de no hacer refuerzos debido a los retornos de Javi Castellano y Hernán Santana, así como al empuje de Fabio. Sin embargo, tras las últimas pinceladas de la premporada y el estreno en Mestalla fichó de una tacada a dos mediocentros. El caso de Prince es muy similar ya que en la misma rueda de prensa de su despedida anunció la entidad que el puesto estaba bien cubierto con jugadores como Vitolo, Halilovic, Calleri o Araujo -que al final salió-, entre otros, para al final traer a dos atacantes.
A pesar de esos bandazos, que costaron caro en las dos primeras jornadas de competición, la UD Las Palmas ha logrado cerrar una plantilla para el recuerdo. Más que preparada para lograr la salvación. Con dos, o incluso más, opciones de garantías por posición. Y con condiciones para plasmar diferentes sistemas según lo que prefiera Manolo Márquez.
Seriedad para la defensa
Leandro Chichizola es uno de los grandes descubrimientos de la dirección deportiva. En solo dos partidos oficiales ha dejado claro que es un portero de gran nivel y que mejora lo que había la temporada pasada. Y es que Javi Varas, a pesar de su experiencia, no tuvo una buena campaña y de hecho no encontró acomodo en Primera División. El meta argentino se puede convertir en un chollo ya que llega libre tras jugar en la Serie B de Italia con el Spezia y, por su edad, la UD puede sacar un rendimiento económico en el futuro.
Ximo Navarro es la otra apuesta para el engranaje defensivo. También a coste cero, el granadino procede del Almería de Segunda División. Es polivalente pero ha sido utilizado sobre todo como central, posición en la que destacó en la primera jornada.
Completa la nómina de defensas un Borja Herrera que es el único jugador que el año pasado estaba en el filial que cuenta con licencia para el primer equipo. Benito, Erik Expósito y Fabio González, aparte de entrenarse con los mayores, cuentan con la confianza de Manolo Márquez, pero lo tendrán muy complicado tras los últimos refuerzos y la plantilla tan larga que ha diseñado la UD.
De cero a dos mediocentros
El centro del campo ha sido la zona que más vueltas ha dado en la pretemporada. La histórica salida de Roque Mesa por más de 12 millones de euros al Swansea ha sido sustituida, en contra del plan establecido al principio, por dos jugadores: Sergi Samper y Alberto Aquilani. Una joven promesa que no ha encontrado su lugar en Primera y un veterano que asegura calidad. Dos jugadores que en teoría dan la talla pero que deben reflejarlo en el campo. La misión de hacer olvidar a Roque no será fácil.
Desborde y pólvora
Y arriba, muchos quilates. Vitolo, que estará hasta diciembre por la sanción de la FIFA al Atlético de Madrid, es el mayor regalo del mercado. Un lujo para el equipo amarillo contar con uno de sus mejores canteranos de las últimas décadas, tricampeón de la Europa League e internacional absoluto.
Su desborde no es el único que ha traído la UD. Oussama Tannane es uno de los refuerzos en los que más esperanzas ha depositado la dirección deportiva. Hernán Toledo, que de momento ha demostrado poca cosa, es otra alternativa procedente de Argentina.
Para la punta de ataque mucho gol ha incorporado la UD. Tras los problemas del año pasado, al menos en cuanto a la puntería de un '9', las incorporaciones de Jonathan Calleri y Loïc Rémy garantizan pólvora. Procedentes de West Ham y Chelsea, protagonizarán una batalla encarnizada en la que el principal beneficiado será la UD.
