La polémica de la bandera de España en la camiseta de la UD Las Palmas fue analizada anoche por el presidente de la entidad, Miguel Ángel Ramírez Alonso. En los micrófonos de la Cadena Ser, el mandatario ofreció su punto de vista, en relación al hecho de lucir la bandera de España junto al escudo y la fecha del 1 de octubre [para el pulso ante el FC Barcelona en el Camp Nou y que finalmente se disputó a puerta cerrada]. "No seré cómplice de los complejos (...) Soy español y mi bandera es sagrada; respeto la bandera de otras comunidades autónomas pero lo que no se puede poner en cuestión es la bandera de España. En la parte trasera del cuello tenemos la bandera de Canarias en la primera equipación de Las Palmas y ésta la hemos puesto [en relación a la Rojigualda]. La bandera de España está fuera de toda duda y comentarios; y luego se añaden las que le den la gana", aseguró el principal mandatario de la entidad amarilla.

Además, Ramírez explicó el protocolo y procedimiento seguido ante la Liga de Fútbol Profesional (LFP) para poner la bandera de España en la elástica amarilla. "Nosotros lo hemos explicado en un comunicado. ¿Provocación? No me puedo plantear que alguien pueda ver como una provocación que un equipo de fútbol nacional, de la mejor liga del mundo, pueda provocar o molestar a alguien por llevar la bandera de su patria, de su país. Somos los primeros que hemos respetado al FC Barcelona, de llevar la de senyera, sacarla cada vez que entiendan que es conveniente. Esas cosas se ven con naturalidad; se verán con la misma naturalidad que llevemos la bandera de nuestro país; de nuestra patria", determinó el mandatario.

Y justifica en "hacer un guiño a nuestra patria" el hecho de lucir la bandera de España, en el día del referéndum. "Hicimos un seguimiento, la consulta para llevar un logo, un acto publicitario...Hemos cumplido rigurosamente con el procedimiento de la Liga (...) Hay un protocolo para poner publicidad, patrocinadores...No hemos cambiado la equipación, hemos añadido. Pero estamos fuera de la política. Solo queríamos hacer un guiño a nuestra patria, a nuestro país. Y tratar de no generar ningún conflicto; respetamos las personas de Cataluña que piden la independencia, y los que no. No entramos en ese debate, fuimos a jugar un partido, lamentablemente lo hemos perdido. Nos sentíamos cómodos luciendo una pequeña bandera de España, y si hemos molestado, si alguien se ha sentido agraviado por haber tomado esta decisión, pues pedirles disculpas. No lo hemos hecho para molestar a nadie".