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La gran depresión amarilla

129 días y cinco entrenadores

El fichaje de Márquez (3 de julio), tras descartar a De Zerbi, marca el inicio de la crisis, que amenaza a Ayestarán

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Entrenamiento de Las Palmas Atlético con Juan Manuel Rodríguez

Baile de estrategas en 129 días de tormenta. Wasaps, correos, apuestas, desencantos, dimisiones, presentaciones y la crisis del Ferrari. Una depresión que salpica al vivero de la factoría de Siete Palmas. De Roberto De Zerbi a Juan Manuel Rodríguez. El laberinto de la pizarra.

El 3 de julio se anunciaba la contratación de Manolo Márquez -que pasaba de Las Palmas Atlético al equipo profesional ante la sorpresa del entorno- tras desecharse la primera opción, la del empírico De Zerbi por su problemática desvinculación con el Palermo-. Comenzaba la era 'post Setién' con un baile de cromos. A seis días del inicio de la pretemporada, el club amarillo, con el mayor presupuesto de su historia, se ponía en manos de un preparador novel en Primera y que duró seis jornadas -85 días-.

Con De Zerbi y Márquez fuera del mapa, aparece la figura de Pako Ayestarán -27 de septiembre-que no ha tenido un aterrizaje alentador: cinco derrotas consecutivas en la competición doméstica. Y una victoria en Copa ante el Dépor en el estadio de Riazor (1-4).

El movimiento tardío de ubicar a Márquez en la UD, ejecutado 107 días después del anuncio de Setién de que no renovaría -lo hizo el 18 de marzo-, provocó la reubicación de Suso Hernández en el filial. El técnico sureño estaba encomendado en primera instancia para llevar las riendas del División de Honor (el famoso 3 de julio), pero aceptaba el desafío de competir en el Grupo IV de la categoría de bronce.

El pasado lunes, Suso pactaba su salida del banquillo de la 'vela chica' con miembros de la comisión deportiva y abría la puerta a Juan Manuel Rodríguez. En la figura de este agitador se pone el foco de una selección para la controversia. ¿Quién elige a los técnicos? ¿Qué grado de responsabilidad tienen?

El piloto del Ferrari

La apuesta por Juan Manuel Rodríguez -125 partidos con el primer equipo en los que dirigió a David García, Vitolo, Momo, Vicente, los gemelos Javi y Dani Castellano, Hernán, Raúl Lizoain o Viera- para el rescate de la 'vela chica' es un movimiento revolucionario.

Un cambio de radical. Agitador y brillante para revertir tendencias, está a nueve puntos del puesto de playoff de permanencia en el Grupo IV. Va colista pero ya salvó a la UD de la quema del descenso en dos ocasiones. Y en su última campaña (2011-12) patentó su registro de director técnico para escenarios en calma. Sin el aroma de la guillotina. Estaba en la casa, ayudando al departamento de Captación y Formación, tanto en el Juvenil B como en el Regional D. ¿Pero por qué regresa ahora a la primera línea, tras permanecer 1.985 días sin la adrenalina de los banquillos?

Este sábado y desde las 17.00 horas (televisado por la TVAC), Juan Manuel Rodríguez, 58 años, se estrena en el Anexo ante el filial del Real Betis, en la disputa de la 14ª jornada -toma las riendas de la 'vela chica' en la jornada 13-.Supersticioso y de fuertes creencias religiosas, desveló en UD Radio parte de su dogma táctico. "Es una cuestión de creer, les he preguntado que si creen en ustedes: '¿Tú crees en ti?' Me han dicho que sí, y en eso estamos trabajando (...) Nadie es mejor que tú si tú no quieres".

El nuevo agitador del vivero es un lector privilegiado de partidos. En situaciones de pánico, destila eficiencia. Llega su turno. Y de forma paralela, en el vestuario profesional de la UD, la figura de Pako Ayestarán afronta ante el Levante UD -domingo 19 de noviembre- un pulso crucial. Tras cinco derrotas consecutivas, se juega su continuidad. ¿Y si llega el sexto traspiés liguero? Sería un golpe dramático al proyecto más ambicioso de la historia. Hay fe en la fórmula 'K' y solo se concibe la tercera victoria en doce jornadas.

La UD, cuyo plantel está tasado en 115 'kilos', late en la penúltima plaza y no gana desde el 17 de septiembre. Con 28 goles en contra, es el conjunto más batido. Dos entrenadores y la incertidumbre. El UD-Levante es el pulso del siglo.

En este marco depresivo, el papel de la dirección deportiva queda en entredicho. Toni Cruz (director deportivo) y Luis Helguera (secretario técnico) apostaron con firmeza por De Zerbi y llegó Manolo Márquez -avalado por Tonono-. Tras la espantada del catalán, de nuevo Cruz y Helguera, que ficharon en 2015 a Setién, se decantaron por Ayestarán. El perfil de Márquez y De Zerbi está a años luz. Igual que el de Suso y Juan Manuel.

¿Y si el agitador regresa a la UD? Suena la música. En el testimonio de los estrategas salientes se detecta la improvisación. Suso reconoce que "me hubiese gustado planificar la pretemporada con rivales de entidad (...) Y haber participado más en la configuración del plantel". Testimonio similar al de Márquez, que se vio en el Ferrari amarillo y le entró el vértigo. Los dos pasan al departamento de Captación. En 129 días, del banquillo al despacho.

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