La UD Las Palmas activa la operación Jesé Rodríguez. El club amarillo ha preguntado al extremo grancanario si desea regresar en el mercado de enero y se ha encontrado con una respuesta afirmativa. Las dos partes quieren volver a unir sus caminos a pesar del mal resultado de la temporada pasada. El principal obstáculo es el Stoke City, club de la Premier League con el que el extremo grancanario tiene contrato de cesión hasta el 30 de junio. Y de por medio también tendrán que convencer al París Saint-Germain, que sigue siendo el propietario de sus servicios. Pero tanto el club insular como el jugador ya trabajan en buscar la fórmula.
Varios aspectos allanan la operación. El más relevante es que no cuenta en el Stoke, donde su trayectoria ha ido de más a menos. En su debut marcó un gol y dio la victoria a su equipo ante el Arsenal. Y en las siguientes siete jornadas salió como titular en seis. Tenía continuidad pero su entrenador dejó de estar satisfecho con su rendimiento y desde entonces solo acumula treinta minutos repartidos en dos partidos. En un duelo reciente abandonó el banquillo antes del final del choque cuando el entrenador, Mark Hughes, agotó los cambios. Su técnico, que podría ser destituido por los malos resultados del equipo, le reprendió en público y aseguró que iba a ser sancionado.
El jugador se encuentra en estos momentos en Gran Canaria, con permiso de su club, cuidando de uno de sus hijos, que está en un delicado estado de salud. Esta situación personal es otro de los aspectos que condicionan la operación.
La temporada pasada la negociación resultaba mucho más compleja. El jugador firmó unos meses antes con la entidad francesa procedente del Real Madrid por unos 25 millones de euros y, aunque apenas había jugado en esa media temporada, la competencia para hacerse con sus servicios era muy elevada y tenía ofertas, todas para un préstamo, que se salían de las posibilidades de la UD.
Sin embargo, el jugador ejerció una enorme presión para volver a Gran Canaria y el cuadro francés tuvo que ceder. El atacante también renunció a una parte importante de su salario, que está en torno a los tres millones de euros anuales, y la operación se concretó al borde del cierre del mercado.
Jesé, de 24 años, tiene contrato con el PSG hasta 2021. El curso pasado en la UD Las Palmas disputó 16 partidos en los que marcó tres goles y dio una asistencia. Su rendimiento decepcionó, si bien el resto del equipo también se desplomó en la recta final de temporada y no le puso fácil brillar en el aspecto individual. El extremo había aterrizado con el objetivo de meter al equipo en competiciones europeas pero la UD inició su caída libre coincidiendo con su llegada. Ahora los dos quieren volver a cruzar sus caminos. El desenlace, sea cual sea, va para largo.
