Seguro que las has visto en tiendas o en la casas de algún amigo. En los últimos años las lámparas de sal han ido ganando adeptos gracias a sus propiedades o a su diseño capaz de aportar a cualquier ambiente un toque étnico y original. Pero, ¿para qué sirven realmente?

Las lámparas de sal, también conocidas como "vitaminas de aire", son bloques puros de sal del Himalaya en cuyo interior se coloca una vela o una bombilla. Se pueden encontrar en piezas sólidas o en pequeños cristales sobre cestas decorativas y sirven como un ionizador de aire perfecto.

Estas piedras emiten iones negativos que aportan equilibrio al entorno al pegarse a los positivos que emiten los dispositivos electrónicos, es decir, son capaces de absorbes el exceso de ondas electromagnéticas.

Además de este, los beneficios de las lámparas de sal son varios:

-Las lámparas de sal transmiten buena energía, según el Feng Shui.

-Aportan al ambiente un toque de color rosado y luz suave que invita a la relajación.

-Mejoran la calidad del sueño al eliminar las ondas electromagnéticas del aire.

-Los iones negativos que emiten estas lámparas pueden ser beneficiosos para el organismo a nivel circulatorio, respiratorio o nervioso.

-Las lámparas de sal reducen la electricidad estática del aire.