Una buena higiene en la nevera es fundamental para mantener los alimentos en buen estado y evitarnos posibles problemas de salud. Si al abrir tu frigorífico notas un desagradable olor, es que necesita una limpieza.

Lo más probable es que ese mal olor proceda de algún alimento que se haya deteriorado, por lo que lo primero es detectarlo y deshacerse de él. Las manchas de comida también son fuente de olores, por lo que debemos asegurarnos de que la nevera esté libre ellas.

En cualquier caso, lo más recomendable es limpiar el electrodoméstico al menos una vez al mes, sacando todos los productos y aplicando agua y jabón.

Trucos para evitar malos olores

Si se derrama algún líquido, hay que limpiarlo al instante porque de lo contrario se secará, generará mal olor y será más difícil de quitar la mancha.

Alimentos como cebollas o ajos desprenden un olor muy fuerte, por lo que conviene forrarlos con papel de plata o film transparente.

Si no los cubrimos, el olor se expandirá por toda la nevera. Por la misma razón en aconsejable tapar todos los restos de comida que queramos conservar.

Si pese a todo la nevera sigue desprendiendo un olor desagradable, prueba con estos consejos:

  1. Corta un limón por la mitad y pincha en su pulpa varios clavos aromáticos.
  2. Introduce en la nevera un vaso con zumo de limón.
  3. Coloca una taza o un vaso de café molido. Los posos del café también eliminan el mal olor.
  4. Pon un plato con pan duro.
  5. Pon un recipiente con bicarbonato sódico.
  6. Introduce un trozo de carbón vegetal.
  7. Introduce una bola grande de miga de pan empapada con vinagre.
  8. Empapa un algodón con extracto de vainilla y déjalo toda la noche en la nevera.

Independientemente del método que uses, acuérdate de renovar el producto hasta que el mal olor haya desaparecido.

Eliminar los malos olores de la nevera. Vídeo: Youtube