A seis días de que la futura Ley gallega de Protección y Bienestar Animal llegue al pleno parlamentario, el PP propone introducir nuevas modificaciones al texto original elaborado por la Xunta, calificado como un "despropósito" por el PSdeG, que pide su retirada.

Después de que el pasado viernes, los populares anunciaran la suavización del polémico artículo que sancionaba con multas de hasta 500 euros la alimentación de animales abandonados, posibilitando que se pueda realizar en determinados supuestos, el grupo parlamentario también incluirá la prohibición del "encadenamiento continuado de perros", sancionado con multas de hasta 5.000 euros, y la posibilidad de que animales con dolencias crónicas o en proceso de curación puedan ser adoptados.

El texto del proyecto ya establece la prohibición del empleo de "cualquier mecanismo o utensilio que, destinados a limitar a impedir la movilidad de los animales, les produzcan dolor, daños sufrimientos, menoscabo o estrés innecesario", pero únicamente especifica como método de sujeción prohibido a "los collares eléctricos que producen descargas".

Según el diputado Gonzalo Trenor, ponente del texto legislativo, la enmienda que el PP registrará hoy en el Parlamento para complementar la redacción inicial con la incorporación del encadenamiento permanente de canes, introduce una de las demandas realizadas por colectivos animalistas con el fin de elaborar una "ley de todos y para todos que no genere problemas a nadie".

A la espera de conocer la redacción final en forma de enmiendas del PP, la asociación Animalista Libera! y la Fundación Franz Weber han calificado "los avances logrados" en su negociación con los populares como una "victoria estratégica" frente a una redacción que "generaba indefensión en materia de bienestar animal". Con todo, ambos colectivos afirmaron ayer a través de un comunicado que seguirán trabajando con todos los grupos parlamentarios para enriquecer un contenido que "todavía aduce algunas sombras".