La novia siempre es la gran protagonista el día de la boda, le pese a quien le pese. Ella brilla con una luz propia que se acentual con la belleza del traje y los complementos que luce; aunque no hay mejor reflejo de la felicidad que la sonrisa que viste ese día.

Las novedades en los vestidos de novia cada temporada varían pero, sin duda, el vestir del blanco es algo que nunca pasa de moda. Y parece que el ser una princesa de cuento tampoco se aleja de las pasarelas. Los vestidos estilo princesa siguen siendo una de las tendencias más fuertes; con un cuerpo ceñido y una gran falda de vuelo que cae hasta los pies, las nuevas versiones del traje princesa recuerdan a los modelos que cualquier niña se imagina de pequeña, con giros que van desde las asimetrías en escotes y caídas, hasta los grandes volantes en cascada o los tejidos troquelados en dulces tonos de todos los tipos.

Romanticismo

Siguiendo el ´look´ princesita, el romanticismo también se verá en las bodas de este año, sobre todo los escotes corazón. Las colecciones están llenas de este patrón capaz de adaptarse tanto a la línea princesa como a las siluetas años 50 de estilo sirena. Strapless, con cuello ilusión cubierto de pedrería o con mangas de encaje, el escote con forma de corazón realza la forma del busto, y es perfecto para lograr el equilibrio ideal entre la imagen de la princesa de cuento de hadas, y la versión más sexy y coqueta de la novia.

Vestidos de novia con escotes asimétricos

Al tradicional escote corazón le acompañan los escotes más asimétricos. Haciendo referencia a la Belle Epoque de principios del siglo XX, y a las posteriores décadas de los años 40 y 50, los vestidos de novia asimétricos definen el espíritu de la novia soñadora: el equilibrio perfecto entre las propuestas cercanas a París y a los trajes de novia ultrarrománticos que enseñan y esconden una picardía especial.

Vestidos de novia con espaldas al descubierto

Una de las tendencias más seductoras de esta temporada son los vestidos con espalda al descubierto.

Prendas que se transforman cuando la novia se da la vuelta, con un sorprendente acabado cubierto de transparencias, aberturas, encajes o gasas finísimas, que invitan a las ilusiones ópticas. Sugerir más que enseñar, con esta premisa se verán elegantes looks de novia de inspiración vintage, con sugerentes siluetas, mangas que desaparecen, bordados en hilo de plata o coquetas botonaduras.

Vestido de novia ¿largo o corto?

Los trajes con mangas completas, tres cuartos o francesas están en alza. Son perfectos para las mañanas encapotadas de otoño, las bodas blancas de invierno o las tardes más frescas de los primeros días de primavera, los vestidos con manga larga, protegen del frío tanto los brazos como la espalda y escote, permitiendo prescindir del bolero, un abrigo de novia o un sobrevestido. Siendo de encaje permiten aumentar aún más la sensualidad en la novia.

Vestidos de novia colorados y con pantalones

Las firmas ya incluyen colores en sus vestidos, y no solo para las damas de honor. Cada vez son más las novias que se atreven a ir al altar vestidas con su color favorito. Rojos, azules, rosas, colores pastel... e incluso telas con estampados; las novias ya no se limitan a llevar el color en los complementos.

La versatilidad ha hecho del pantalón una muy buena alternativa para las mujeres que buscan un ´look´ menos perecedero que el tradicional vestido ya que se pueda volver a lucir en una cena, un coctel o, simplemente, una fiesta de verano. Las colecciones nupciales incluyen varios pantalones en los que enfundarse sin complejos, sea cual sea el estilo personal de la novia, desde unos pantalones pitillo cubiertos de encaje o pedrería, los de pata ancha combinados con toreras cortas y con crop-tops que dejan el ombligo al aire, o sus versiones más refrescantes, como shorts y monos de una pieza.