El equipo médico del Instituto Universitario Dexeus de Barcelona ha logrado el primer nacimiento en España de un bebé fruto de la vitrificación de ovocitos de una mujer que padecía un cáncer de ovarios que ponía en riesgo su capacidad reproductiva.

"Es un caso excepcional en el que, además, el procedimiento usado era la única vía de preservar la maternidad de la paciente", ha explicado hoy en conferencia de prensa el presidente de la Fundación Dexeus Salud de la Mujer, Pedro Barri.

En agosto del 2009, Vanesa fue diagnosticada de un tumor en el ovario izquierdo en un centro médico de Aragón, donde le extirparon este órgano en una operación quirúrgica.

Tras la biopsia, los doctores de ese hospital le comunicaron a Vanesa, que entonces tenía 28 años, que el tratamiento afectaría su capacidad reproductiva, por lo que la joven aragonesa optó por trasladarse a Barcelona para una segunda opinión médica.

El equipo de la Dexeus sometió a la mujer a dos ciclos de estimulación ovárica para obtener ovocitos para su congelación y, tras culminar este proceso, se sometió a una segunda intervención quirúrgica en julio del 2010 para extirpar el otro ovario.

Un año y medio después, tras superar el cáncer, le implantaron parte de los embriones resultantes de los ovocitos vitrificados y, 39 semanas después -el pasado 12 de junio-, nació Mario.

"Cuando me dijeron que tenían que extirparme los ovarios me derrumbé, pero surgió esta posibilidad y me siento muy feliz, porque ser madre era mi gran deseo", ha relatado hoy Vanessa, que ahora tiene 31 años.

La madre ha asegurado hoy que su deseo de procrear era tan fuerte que incluso el cáncer pasaba a segundo plano: "Para mi era más importante ser madre que la enfermedad que tenía, no pensaba mucho en mi problema oncológico".

En parte, su preocupación por la enfermedad quizá no era tan aguda porque desde el primer momento el pronóstico fue bueno, hasta el punto de que no fue necesario extirparle el útero, una práctica necesaria en los cánceres de ovario avanzados y que elimina la posibilidad de embarazo.

Además, según han explicado los doctores de la Dexeus, el hecho de poder hablar a Vanesa de un proyecto de futuro como era el de tener un bebé le dio muchos ánimos para afrontar la terapia.

Todo el tratamiento al que se ha sometido Vanesa suma una factura de unos 15.000 euros, un importe que ha sido financiado íntegramente por la misma Fundación Dexeus.

Vanesa es el primer caso en España de una mujer que ha sido madre por una vitrificación realizada en el transcurso de un cáncer de ovarios y sólo se ha dado otro caso similar, hace dos años en Valencia, pero en una paciente con cáncer de mama.

Aunque el caso de Vanesa es muy particular y no se puede aplicar a todas las pacientes con cáncer de ovarios, sí que evidencia que existen posibilidades para mujeres que se deben someter a una terapia oncológica por tumores en el aparato reproductivo y que quieren preservar la fertilidad.

De hecho, el Instituto Dexeus tiene 88 pacientes con cáncer que se han sometido a un proceso de congelación de ovocitos o de tejido ovular para poder ser madres una vez superen la enfermedad.

"Con el cáncer no se termina la vida, con los avances médicos de los últimos años una mujer joven puede sobrevivir perfectamente y le quedan todavía muchos años de vida para cumplir con su deseo de ser madre", ha concluido hoy el director de Oncología de Dexeus, Rafael Fabregas.

Mario nació el pasado 12 de junio por cesárea, justo 25 años después del alumbramiento del primer bebé en España fruto de congelación de embriones que llevó a cabo el Instituto Dexeus.