Los ojos, como la piel, también tienen memoria. Por eso, los oftalmólogos recomiendan empezar a cuidar la vista desde los primeros años de vida. Y ponen especial atención al sol. La OMS (Organización Mundial de la Salud) recomienda tomar medidas para proteger ojos y piel a partir de un índice de radiación ultravioleta (IUV) superior a 3. Un dato que en España sobrepasamos la mayor parte de los días.

Cuanto más alto es el valor del IUV, mayores son las posibilidades de que los ojos resulten lesionados y menor es el tiempo necesario para que se produzca la lesión. Por ello, la Fundación Alain Afflelou ha puesto en marcha la Campaña de Protección Solar Infantil, con la que se quiere sensibilizar a la sociedad de la importancia de proteger principalmente a la población infantil frente a los rayos solares. Especialmente en países como España, en los que se produce una alta exposición al sol.

Según la Dra. Teresa del Río, oftalmóloga de la Clínica Ruber, "lo mismo que cuando vamos a la nieve no se nos pasa por la cabeza ver a un niño sin gafas de sol, exactamente debería pasar lo mismo con la playa y la piscina. Tanto el agua como la arena reverberan la radiación solar, por lo que se convierten en sitios de peligro para los ojos." Y añade que: "en verano lo que estamos viendo es que continúan las alergias primaverales y nuevas alergias. Y sobre todo conjuntivitis tóxicas por el cloro; también infecciosas por el uso de las piscinas. Y, como nueva patología de verano lo que aparecen son quemaduras. Tanto a nivel de la córnea (queratitis) o de la córnea conjuntiva (queratoconjuntivitis). En principio son leves, deben curar en pocos días y se deben al efecto directo del sol."

Las consecuencias de proteger los ojos

Según datos de la OMS, entre 12 y 15 millones de personas se quedan ciegas al año a causa de las cataratas. Según la organización mundial, un 20% de esos casos se debe a la exposición solar. Además, el ojo del niño es más indefenso que el del adulto, su cristalino es casi transparente hasta los 10 ó 12 años, por lo que sus ojos absorben toda la radiación. "Hasta el 80% de toda la radiación solar perjudicial para la vista la vamos a absorber antes de los 18 años. Por eso es muy importante acostumbrar a los niños medidas protectoras como gafas de sol", asegura la doctora del Río.

La radiación solar en los ojos, al igual que en la piel es acumulativa. Por lo tanto, cuando más tiempo se tome el sol sin la protecciónocular adecuada, aumentan las posibilidades de desarrollar enfermedades como:

Cataratas: enfermedad de los ojos en la que el cristalino se va opacando poco a poco, lo que va disminuyendo la visión y acaba causando ceguera.

Pterigión: carnosidad blanca o de color crema que aparece en la superficie ocular.

Carcinoma epidermoide de la córnea o de la conjuntiva: tumor raro de la superficie ocular.

Cómo proteger los ojos

Para evitar estas lesiones en los más pequeños, la Fundación Alain Afflelou recomienda:

Uso de sombrero y gafas de sol siempre que los niños vayan a estar en contacto con el sol. Según la OMS, entre las 10 de la mañana y las 14 horas de la tarde recibimos el 60% de la radiación UV diaria.

Nunca, ni siquiera con protección, exponerlos al sol entre las 12 y las 16 horas.

En la playa es aún más prioritario proteger los ojos del sol ya que la arena blanca refleja hasta el 15% de la radiación solar.

No exponer al sol directamente a los niños menores de 12 meses.

Es muy importante fomentar la protección solar mediante sombreros y gafas de sol con filtros adecuados, ya que de este modo se puede disminuir el riesgo de padecer algunas patologías oculares. Las gafas de sol infantiles, al igual que las de los adultos, deben estar homologadas ya que las gafas no homologadas suponen un grave peligro para la salud visual.