Estás desmotivado. Te encuentras especialmente cansado y no hay una razón aparente. Sufres cambios de humor repentinos. ¿Qué te ocurre? La primavera ha llegado y estás sufriendo las consecuencias: padeces astenia primaveral.

La astenia es un trastorno pasajero que afecta a la vitalidad y al estado de ánimo y que, según algunos estudios cada año sufre, aproximadamente, la mitad de la población, más mujeres que hombres y, con más frecuencias, entre los 30 y los 50 años.

¿Qué la provoca?

Entre las causas de la astenia primaveral está, como su nombre apunta, el cambio estacional. Más horas de luz, el cambio de horario, el aumento de las temperaturas... provocan alteraciones en la producción de hormonas.

¿Cuáles son los síntomas?

La astenia no es una enfermedad. Afortunadamente sus síntomas son leves y en un corto periodo de tiempo, entre dos y tres semanas, suele remitir. Es el tiempo que el organismo tarda en adaptarse a las nuevas condiciones. Quienes padecen este trastorno experimentan una serie de síntomas comunes: cansancio generalizado, dificultad de concentración, fatiga muscular, irritabilidad, falta de apetito, alteraciones en el sueño, tristeza sin causa aparente y dolor de cabeza.

Cómo combatir la astenia:

€ Sigue unos hábitos de vida saludable y mantén un ritmo ordenado. Levantarte y acostarte a la misma hora y mantener unos horarios fijos para las comidas, pueden suponer una gran ayuda para que nuestro organismo reencuentre el equilibrio.

€ Mantente hidratado. Bebe dos litros de agua al día, infusiones y zumos para lograr una hidratación suficiente.

€ Descansa adecuadamente. Es aconsejable dormir ocho horas al día. Cena ligero y al menos dos horas antes de acostarte para que la digestión no interfiera en el sueño.

€ Haz ejercicio. Practicar una actividad deportiva moderada ayudará a nuestro cuerpo a liberar tensión y estimulará la producción de endorfinas.

€ Evita las sustancias estimulantes. Evita el tabaco, el alcohol o el café. Hay muchas infusiones que pueden ser una magnífica alternativa a las bebidas excitantes.

€ Ayuda a tu organismo. La fitoterapia ofrece plantas que aumentan la vitalidad como el ginseng o el eleuterococo; plantas que potencia el sistema inmunológico como la equinácea. El propóleo es un producto natural que ayuda a mejorar las defensas. La jalea real y el polen alivian la sensación de fatiga y aumentan el rendimiento físico e intelectual. Plantas depurativas, como la cola de caballo, ayudan a eliminar sustancias tóxicas que pueden contribuir a disminuir la vitalidad del organismo.