Es fácil olvidarse de los pies, pero también supone grandes beneficios el cuidar de ellos. A medida que envejecemos, los dolores crónicos en los pies y sus problemas más comunes, como la tendinitis, juanetes y artritis, pueden ir limitando la movilidad de forma creciente.

Según señalan desde el blog sobre salud de la Escuela de Medicina de Harvard en Estados Unidos dar unos pasos simples en el cuidado de los pies puede ayudar a conservar, o incluso mejorar, la movilidad. Aquí, los facultativos de Harvard presentan cinco aspectos destacables:

1. Mantener un peso saludable: tener sobrepeso afecta a tus pies al poner una mayor fuerza sobre ellos en cada paso que das. También puede aumentar el riesgo de tener patologías como la artritis en los pies y empeorar el dolor derivados de otros problemas en los pies.

Tener sobrepeso también puede dañar la salud de los pies al aumentar el riesgo de diabetes o peor circulación sanguínea, lo que puede conducir a dolor de pies y a pérdida de sensación en ellos.

2. Utilizar buenos zapatos: las modas en los zapatos van y vienen, pero toda una vida de utilizar zapatos confortables es una de las mejores medidas preventivas que se pueden tomar para asegurar una buena movilidad. Utilizar zapatos ajustados o tacones altos de vez en cuando para salir alguna noche no ocasiona daños duraderos.

Sin embargo, cuando sabes que vas a estar de pie la mayor parte del día, hay que elegir zapatos confortables con un buen apoyo. Invierte en zapatos de deporte que se adapten bien a tus necesidades al correr, realizar aerobic y otras actividades de alto impacto.

3. Hidrata tus pies: la piel de los pies tiende a volverse más fina y seca con la edad. Las callosidades en los pies pueden agrietarse y sangrar, lo que ocasiona dolor. Para mantener la piel suave, emplea una loción hidratante espesa en los pies después de las duchas o baños en la medida necesaria, pero evita los espacios entre los dedos ya que demasiada crema puede conducir a infecciones.

4. Practica una buena higiene: lava y seca tus pies profusamente cuando tomes un baño o ducha. Corta las uñas de los pies rectas a lo ancho para evitar que las uñas crezcan hacia dentro. Utiliza una piedra pómez o lima de pies para eliminar con suavidad las callosidades. Si utilizas esmalte de uñas en los pies, mantén las uñas sanas dejándolas 'respirar' durante un par de días después de eliminarlo y añadir más.

5. Estira tus pies: las personas que no suelen pensar en estirar la parte delantera y trasera de sus pies pero los estiramientos pueden ayudar a tratar, y prevenir, el dolor de pies. Los estiramientos del tendón de Aquiles son también muy importantes.