Una nueva rotonda autoguiada en Santa Cruz de Tenerife está sembrando el caos entre los conductores. Ubicada en el cruce de la Avenida Tres de Mayo con Benito Pérez Armas, ha causado confusión por la nueva señalética que muestra las maniobras que a partir de ahora están permitidas y cuáles no. El carril que evidenció mayores problemas para los conductores ha sido el que discurre en sentido descendente desde la Avenida Benito Pérez Armas hasta la rotonda, que obliga a tomar la primera salida hacia la derecha exclusivamente.

A pesar de que en el pavimento se ha pintado una doble línea contínua que impide incorporarse a la rotonda, muchos conductores ponían el "piloto automático" y se saltaban la prohibición con el riesgo de colisionar con los vehículos que circulan por el carril interior de la misma en dirección a la TF-1.

El gran olvidado ha sido el nuevo carril de acceso de los vehículos que salen de Tomé Cano y quieren incorporarse a la Avenida Benito Pérez Armas en dirección a la Rambla de Santa Cruz. Hasta ahora salían a la Avenida Tres de Mayo, pero ya no hace falta al habilitarse esta vía auxiliar. En el transcurso de una hora, ningún conductor optó por circular por esta vía si salía desde Tomé Cano para evitarse la cola en la rotonda.

"Es que hay demasiadas líneas pintadas: de blanco y amarillo; y muchas vías que confluyen en esta rotonda", acertaron a decir a este periódico dos agentes de Tráfico de la Guardia Civil que salían de la ciudad en un vehículo de Atestados tras realizar unas gestiones en la delegación de Tráfico de Tomé Cano. De hecho, los agentes tampoco habían utilizado la nueva vía auxiliar ascendente a pesar de que se incorporaron finalmente hacia la Avenida Benito Pérez Armas en dirección ascendente.