La recaudación de impuestos de la Comunidad Autónoma en 2010 se ajustó a las previsiones estimadas en un principio, con un ligero desvío de un 1%, animada por el incremento de algunos de los tributos ligados al consumo. De esta forma, las arcas autonómicas ingresaron el pasado año unos 1.800 millones de euros y se pudieron cumplir las estimaciones de recaudación después de dos años -2008 y 2009- donde el descenso de los ingresos fue de un 30%, ocasionando graves problemas financieros no sólo al Ejecutivo sino también a los cabildos y ayuntamientos canarios.

Las previsiones cuando se elaboraron los presupuestos de 2010 ya reflejaban un importante descenso de los ingresos tributarios de un 27% en los impuestos directos y de un 20% en los tributos indirectos con respecto a 2009, año que supuso un punto de inflexión en la recaudación en relación a las estimaciones iniciales. Tras dos ejercicios de descuadre de los ingresos, la Consejería de Economía y Hacienda realizó una previsión más realista, que es la que finalmente se ha cumplido debido al crecimiento negativo que experimentó la economía canaria.

Hasta el mes de noviembre se habían recaudado 646 millones de euros de los 775 millones previstos de la tarifa autonómica del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Con respecto a las impuestos indirectos, la recaudación neta hasta el 30 de noviembre era de 757 millones de los 902 millones previstos a principios de año.

El comportamiento en la recaudación de los diferentes tributos es desigual. En el caso de los gravámenes indirectos, su evolución a lo largo del año refleja la situación de la economía canaria. Los derechos reconocidos del impuesto de transmisiones patrimoniales ya superaban en noviembre la recaudación prevista en más de 30 millones de euros, lo que indica que la compra y venta de viviendas y otras propiedades se incrementó el pasado año.

Otros impuestos que también han tenido una evolución positiva a lo largo del año son el gravamen sobre los combustibles o la matriculación de vehículos. Por lo que respecta al Impuesto General Indirecto Canario (IGIC), su comportamiento está vinculado al consumo, de tal forma que hasta noviembre había recaudado 146,6 millones de euros de los 170 millones previstos inicialmente, lo que supondrá sólo un ligero descenso.

A pesar de la recesión económica, que se fue agravando en 2008, los presupuestos de 2009 de elaboraron con un crecimiento superior al 15% con respecto al año anterior. El recrudecimiento de la crisis y la caída del consumo arrastraron consigo a los ingresos de los impuestos indirectos, fiel reflejo de la situación del mercado.

En los presupuestos de 2011 la Consejería de Economía y Hacienda estima unos ingresos por impuestos directos similares a los de 2011, mientras que por impuestos indirectos sí se refleja un crecimiento del 17% debido a las previsiones de ligera mejora de la economía.