La televisión local Canal 7 "facturó a Inversiones Las Teresitas (ILT) casi 100 millones de pesetas por una campaña de publicidad inexistente para cambiar su línea de opinión" sobre la operación de compraventa de Las Teresitas. Es lo que aseguran los policías que participaron en la operación Malvasía. La pista del papel mediático que jugó Canal 7 se abrió a raíz de las informaciones confidenciales recibidas por un testigo protegido.
El informante señaló que el propietario de Canal 7, Francisco Padrón, "habría recibido 100 millones de pesetas" por cambiar su parecer sobre los planes de los responsables de ILT, Antonio Plasencia e Ignacio González. "A raíz del análisis y de la investigación desarrollada, se detectó que ILT pagó en 2001 exactamente 98 millones de pesetas por una supuesta campaña publicitaria, que en base a la información analizada nunca se llegó a realizar. Por lo tanto, el motivo de dicha entrega de dinero es el señalado por el informante confidencial", concluyeron los agentes.
Sin repercusión mediática
A los policías les llamó la atención que uno de los socios de Canal 7 fuera un hijo de Plasencia; que su responsable, Francisco Padrón, fuera una persona del entorno más estrecho del exalcalde; o que este canal no tuviera entonces "entidad ni repercusión mediática suficiente para realizar una campaña que justificase dicho desembolso en publicidad". Asimismo, el dinero no se pagó directamente a la sociedad mercantil, sino que se hizo cancelando una serie de deudas que amenazaban con llevar a Canal 7 del Atlántico al cese de sus emisiones.
Padrón, en sus declaraciones ante la magistrada instructora del caso Las Teresitas, Carla Bellini, aseguró que el spot sí existió, que se emitió durante una larga temporada, que recibió el dinero para saldar parte de una deuda pendiente y que nunca dio instrucciones sobre qué debían opinar los diferentes contertulios de sus programas.
Uno de los más críticos con el caso Las Teresitas en esas tertulias de Canal 7, Justo Fernández, aparece precisamente en las escuchas del sumario de Las Teresitas adulando al constructor Antonio Plasencia, en una llamada del 8 de febrero de 2007. "Oye, habrás observado que yo no he hablado nunca ni he criticado nada de los empresarios, sino sólo de los políticos, ¿eh?", le dice al imputado, para añadir: "Tú sabes que siempre te he respetado. Son riquezas que estás creando para ti... Estoy viendo una obra tuya que ahí está". Justo Fernández es autor de los libros La corrupción en Canarias y Canarias, el paraíso expoliado.
