El consejero de Obras Públicas y Política Territorial, Domingo Berriel, estuvo ayer de acuerdo con el diputado Román Rodríguez, de NC, al asegurar que los empresarios con inversiones urbanísticas bloqueadas en Gran Canaria han lanzado un "ataque preventivo" contra el Gobierno. Si no fuera así, señaló el consejero, no podría entenderse que hayan coincidido en el tiempo las críticas contra el departamento que dirige y que se hagan "para tratar de conseguir exactamente lo que quieren en un sitio determinado y en contra de los acuerdos y las decisiones ya tomadas desde las instituciones".

Berriel, en una comparencia en el Parlamento a petición propia, se preguntó en voz alta el motivo de que arrecien en estos momento las críticas de los empresarios contra el Ejecutivo y, sin embargo, nada se diga del planeamiento insular, necesario para sacar adelante los proyectos, y con el que "llevan teniendo problemas desde hace muchísimos años atrás" por sus retrasos. Al Gobierno, afirmó, "se le piden exclusivamente medidas excepcionales, medidas que van contra el principio de igualdad".

En la estrategia de poner en cuestión las demandas de los empresarios, que la pasada semana forzaron una reunión de urgencia con el presidente Paulino Rivero a fin de buscar soluciones urgentes, el consejero negó también las acusaciones de boicot a Gran Canaria por parta de la Comisión de Ordenación del Territorio y Medio Ambiente de Canarias (Cotmac) -que debe autorizar en último término los proyectos urbanísticos- y de los funcionarios de ese departamento. "La Cotmac no bloquea absolutamente nada, decir eso es pretender retomar el viejo pleito insular y está plenamente fuera de lugar. Y no es menos falsa la acusación de arbitrariedad por parte de los funcionarios que deben estudiar los expedientes", aseguró Berriel.

Debate insularista

Defendió, de una parte, que la Cotmac mantiene un único criterio y dictamina de forma objetiva y equilibrada sobre todos los asuntos que ha de analizar, con independencia de la isla de procedencia; y descartó, igualmente, las acusaciones de pasividad de los empresarios afectados por lo que califican "maraña legislativa y burocrática".

"Es fácil disparar contra el Gobierno cuando es precisamente el que está removiendo todos los obstáculos, incluso trayendo al Parlamento medidas como los planes supletorios de los municipios para permitir que "legalmente", muchos de los proyectos paralizados continúen.

"De pasividad, nada de nada", dijo. "El Gobierno está supliendo la pasividad de otros, que son los que precisamente acusan al Gobierno de pasividad". Pese a las explicaciones del consejero, desde el grupo parlamentario popular se sostiene que sí existe partidismo en la Cotmac. Y puso como ejemplo que de los 22 planeamientos municipales aprobados por la Cotmac 19 son de la provincia occidental y solo tres de la oriental.