La nueva Ejecutiva del PSC-PSOE tinerfeño alcanzó ayer el respaldo del 62,74% después de que su secretario general, Manuel Fumero, tardara veinte horas en consensuar la que se supone será la directiva de "la unidad". Se deja atrás dos años de gestora y un cisma que costó un centenar de afiliados, pero aparentemente no se han logrado solventar las diferencias entre quienes respaldan la gestión del secretario general de los socialistas canarios, José Miguel Pérez y los que ponen en cuestión su papel en el Gobierno regional como vicepresidente.

La tardanza, explicó el nuevo dirigente, no es fruto de que las heridas abiertas en el partido en la Isla fuesen muy profundas, sino por el hecho de que "éste es un partido con muchas sensibilidades, un partido en el que lo importante no somos quienes lo dirigen, sino las personas y los ciudadanos". Fuese por lo que fuera la nueva cúpula PSC en Tenerife logró un 6,99% más de apoyo que el conseguido el día anterior por el nuevo secretario insular.

Como estaba previsto, tanto Manuel González (que unió su candidatura a la de Fumero) como Manuel Correa estarán presentes en la nueva dirección regional, como secretario de Organización y vicesecretario general, respectivamente, y el alcalde de Güímar, Rafael Yanes, será el presidente.

El sector de Javier Abreu, el candidato del sector crítico, consiguió una decena de representantes en una dirección de 40 miembros, si bien ninguno con un área específica.

Fumero apuntó que la Ejecutiva, señaló, es integradora gracias a la generosidad de su adversario, Abreu, "que me dijo que si no salía secretario insular iba a dar un paso a un lado y apoyar a la nueva Ejecutiva".