El consejero de Presidencia, Justicia e Igualdad del Gobierno canario, Francisco Hernández Spínola, se vio obligado a reconocer ayer en la sesión de control del Parlamento que los recortes presupuestarios afectarán, aunque no de forma masiva, al empleo público en Canarias en 2013. "El compromiso de este Gobierno es evitar despidos masivos y generalizados, pero una reducción de 547 millones de euros tendrá consecuencias en el capítulo I, referido a Personal", afirmó Spínola.

El consejero respondió de esta forma a una pregunta concreta de Román Rodríguez, portavoz del grupo mixto, quien exigió al Ejecutivo que "no sigan pagan- do la crisis los recortes y los empleados públicos".

"El despido será la última de las decisiones que adoptará este Gobierno, pero deberemos proceder a una mayor flexibilidad in- terna, a no renovar contratos temporales y trabajaremos en la re-distribución de los efectivos", reconoció el consejero.

Spínola rechazó "rotundamente" las tesis del presidente de la patronal tinerfeña, José Carlos Francisco, que defiende la necesidad de despedir a 5.000 trabajadores públicos el próximo año, y aseguró que "fomentar esos rumores es una irresponsabilidad". "Canarias es la quinta comunidad autónoma con menos empleados públicos por habitante de España, y siete de cada diez son docentes o personal al servicio del Servicio Canario de Salud", dijo el consejero. Para Spínola, "especular solo genera ansiedad, pérdida de productividad, tensión e incertidumbre".

Sin embargo, Rodríguez insis-tió en que "en los últimos 15 me-ses la EPA ha puesto en eviden- cia que nuestra Comunidad ha destruido 32.500 empleos públicos, de quienes atienden a nuestros niños en nuestras escuelas y hospitales. Se ha puesto de moda despedir empleados públicos", culminó el líder de NC.

Los socios del pacto, Coalición Canaria y Partido Socialista, han pugnado en las últimas semanas por la repercusión que los nuevos recortes podían provocar en el capítulo de personal, debido al elevado gasto en nóminas. Ya antes del ajuste de 800 millones de euros en el presupuesto de 2012 se contempló un posible despido masivo de empleados públicos, al que se opuso el PSC. Ahora se ha repetido una situación similar pero en las cuentas que ultiman los socios del pacto no hay una drástica caída de salarios y personal. Sin embargo, los presupuestos que se aprueben antes del 31 de diciembre estarán sujetos a los posibles vaivenes que un hipotético rescate pueda provocar el próximo año.