Dos médicos forenses adscritos al Tribunal Supremo (TS) han concluido que Elsa Kaehler, la exesposa del senador por Gran Canaria Borja Benítez de Lugo, no se autolesionó para denunciar al parlamentario del Partido Popular (PP) por un delito de violencia machista en agosto del año pasado, cuando fue a casa de su expareja a recoger a una de sus hijas y se vio envuelta en un episodio de supuestos malos tratos.

Ese informe, al que ha tenido acceso este periódico, establece que "algunas" de las lesiones denunciadas "no pueden corresponder a una acción autolesiva por su topografía y localización". Se refieren los expertos en Medicina Legal a los arañazos y eritemas que Kaehler sufrió en la espalda.

El senador, que está imputado por el Supremo y sujeto a una orden de alejamiento, presentó un informe forense de parte para tratar de acreditar que su exmujer se causó esas heridas. Sin embargo, el dictamen solicitado por el magistrado instructor a dos peritos independientes descarta esa hipótesis.

Y es que por la naturaleza de las heridas los médicos consideran que "ha existido movimiento entre agresor y víctima, siendo compatible con un mecanismo de fricción y roce, es decir, por la acción de una fuerza tangencial". También concluyen que el origen de esos arañazos y eritemas es "reciente por las características cromáticas de los mismos".

El parlamentario ha pedido al juez que le levante la orden de alejamiento ante el "estigma social causado" por esa medida de seguridad, pero el instructor, Antonio del Moral, ha rechazado esas solicitudes. Ahora, tras el informe de los forenses del TS, el magistrado deberá decidir si archiva el procedimiento o tramita el suplicatorio para sentar al senador en el banquillo, tal y como ha solicitado el abogado Ignacio Gordillo.

En cuanto a la parte civil de la disputa, ambos llegaron recientemente a un acuerdo tras renunciar Kaehler a la pensión alimenticia de una de sus hijas. Benítez de Lugo aseguró en su momento que su ex lo denunció para lograr una mejora de esas condiciones.