El presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Bravo de Laguna (PP), acusó este lunes al Gobierno canario de "obstinarse" en defender los intereses de Tenerife, con su reticencia a permitir que se construyan hoteles de cuatro estrellas sin ligarlos a la renovación.

Bravo de Laguna, en declaraciones a Efe, ha criticado la inclinación que observa en el presidente del Gobierno canario, Paulino Rivero, y en su consejero de Política Territorial, Domingo Berriel (CC), a favor de "los intereses determinados de una isla".

En este sentido, ha considerado que tanto Rivero como Berriel cambiarían de postura sobre esta cuestión "al darse cuenta de que su política no les ha supuesto mayores apoyos en Tenerife de cara a su candidatura electoral", pero "siguen obstinados en defender intereses de una determinada isla frente a otra". Además, ha manifestado que el Gobierno canario "sigue tomando el pelo" a los grancanarios, a su "propia gente de CC en esta isla, y a Nueva Canarias y a los grupos parlamentarios" al no revisar la ley turística como se había comprometido al año de entrada en vigor.

El presidente del Cabildo grancanario ha expresado su sorpresa al conocer la posición del comisionado para el Desarrollo del Autogobierno, Fernando Ríos, que, sin saber los resultados de esa evaluación de la ley, anticipa que no se van a autorizar hoteles de cuatro estrellas nuevos en Gran Canaria, pues se basa en que se pueden construir de sobra con los proyectos de renovación y la rehabilitación.

Bravo toma esas declaraciones de Ríos al periódico "La Provincia" como una filtración del Gobierno en cuanto a su posición respecto a la hipotética revisión de la ley turística, al tiempo que añade que decir que Gran Canaria "tiene de sobra con la rehabilitación de hoteles es una burla". Tenerife aventaja a Gran Canaria en 16.000 camas de esa categoría hotelera, ha insistido Bravo de Laguna, quien cree que "siguen tomando el pelo a los grancanarios, a la gente de CC en esta isla, a Nueva Canarias y a los grupos parlamentarios". A su juicio, el Gobierno solo quiere conseguir que Gran Canaria no pueda mejorar su oferta turística en este segmento, que es "esencial" para la isla.

Gran Canaria cuenta con una oferta turística "muy buena" en hoteles de cuatro estrellas, que hace atractiva a la isla, pero hay que aumentarla, lo cual se ha dicho por "activa y pasiva", porque se está en desventaja respecto a otras islas en ese segmento, ha insistido el presidente del Cabildo. Además, ha subrayado que "no hay ninguna razón para que se limite esta posibilidad en terrenos clasificados ya por los ayuntamientos como urbanizables, pues no se trata de utilizar más suelo sino de emplear el que esté ya calificado como susceptible de ser construido.

"Estamos en un punto en el que los sectores económicos, sociales y empresariales de Gran Canaria deberían ya decir hasta aquí hemos llegado", opina Bravo de Laguna, quien ha asegurado que el Cabildo continuará con su acción para "decir basta ya de tomar el pelo a Gran Canaria".