Nueva Canarias no tentará a Paulino Rivero para las próximas elecciones. Una reunión en el hotel Santa Catalina de la capital grancanaria entre el presidente del Gobierno y el dirigente de NC, Román Rodríguez, celebrada el pasado martes, hizo saltar las alarmas en la rumorología de posibles pactos preelectorales. El encuentro se produjo justo un día después de que Rivero publicara su controvertido artículo a favor de la soberanía compartida con el Estado.

Desde el mismo lunes, el presidente del Gobierno y de CC ha recibido la reprimenda de su partido, que no comparte esa propuesta soberanista, ni que la haga por cuenta propia, sin consultar a la formación y, más aún, poniendo en entredicho el liderazgo del candidato nacionalista a la Presidencia, Fernando Clavijo.

Las lenguas se han desatado en todo tipo de especulaciones sobre los motivos de Rivero de saltarse al cabeza de lista de CC, al formular públicamente esa propuesta de gran calado político lo que, según dirigentes nacionalistas, ya no le corresponde a él sino a Clavijo, tras vencerle en la carrera a la Presidencia el pasado septiembre.

Entre las conjeturas se abre camino que Rivero, sin apoyo entre sus propios, busca más protagonismo ciudadano en los siete meses que restan de legislatura con el soporte del PNC, presidido por Juan Manuel García Ramos, para presentarse como cabeza de lista de esa formación actualmente integrada en CC. Dicen que Rivero no se resigna a dejar la primera línea y que cuenta con los descontentos de su partido en Fuerteventura, Lanzarote, La Gomera y Gran Canaria.

En ese contexto de rumores es donde se incardina el encuentro con el presidente de Nueva Canarias. Román Rodríguez rechazó ayer categóricamente que haya un posible acuerdo con Paulino Rivero para concurrir en coalición, junto al PNC, a las elecciones autonómicas del 2015. Reconoce que se reunieron en dicho hotel, pero "era una cita que estaba prevista para el 4 de septiembre", que se demoró por problemas de agenda, y entra dentro de la rutina, ya que, asegura, se han reunido en otras ocasiones.

En la del martes departieron sobre la crisis del ébola, la ley turística y, entre otras cuestiones, acerca de la propuesta soberanista de Rivero. "Son encuentros normales", subraya Rodríguez. De hecho, próximamente lo va a hacer con el vicepresidente del Gobierno y secretario general de los socialistas canarios, José Miguel Pérez, añade.

Rodríguez asegura que Nueva Canarias "no va a tener ningún entendimiento electoral antes de las elecciones, ni con Rivero, ni con el PNC, CC, PSOE o el PP". Es una organización estructurada nacionalista de izquierdas y pretende presentarse a "60 ó 70 ayuntamientos de todas las Islas, los siete cabildos insulares y el Parlamento", para lo que está realizando pactos con otro tipo de formaciones de menor tamaño y más locales. En Tenerife está en conversaciones con distintas agrupaciones como Alternativa Democrática por Santa Úrsula, Alternativa por Güímar y, entre otras, repetirán con Por Tenerife. En Gran Canaria están con agrupaciones de San Mateo, Valsequillo, Gáldar, Valsequillo, Firgas o Agüimes. Los datos que maneja Rodríguez es que su formación consiga entre cinco y ocho diputados en el Parlamento, frente a los dos actuales, lo que sumados a los cuatro que puede lograr Podemos -"si se sabe organizar", remarca,- propiciaría cambios en el mapa político de la Cámara canaria. Así se lo explicó a Rivero, que tiene una visión distinta ya que no ve a Podemos en el Parlamento.

Pasadas las elecciones, se abrirá el proceso de pactos porque no habrá mayoría, aunque el PP es la menor de las apetencias de Nueva Canarias. Asegura que las posibles confluencias de acuerdos de gobierno dependerán de las sinergias de los programas electorales.

Soberanía

Román Rodríguez considera que la propuesta de Rivero, de lograr un territorio con plena autonomía interna, obliga a CC y el PSC -socios en el Ejecutivo- a retirar el texto de reforma del Estatuto de Autonomía presentado a principios de año en el Parlamento, que Nueva Canarias no apoyó. "Las modificación estatutaria presentada es extemporánea y sólo quiere evitar la reforma electoral", afirma Rodríguez, quien defiende rebajar los topes para acceder al Parlamento al 5% de los votos en las circunscripciones insulares -ahora está en el 30%-. NC aboga por un nuevo estatuto político para las Islas en el marco de la reforma constitucional, tras un proceso de participación ciudadana, "para colocar a Canarias en el primer nivel de autogobierno".