El Gobierno de Canarias rebajará en 2015 el tramo autonómico del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) para las rentas media y bajas, según ha hecho público este jueves tras la reunión del Consejo de Gobierno celebrado en Santa Cruz de Tenerife.
La bajada del impuesto beneficiará a 703.000 canarios, el 97 por ciento de los contribuyentes.Según explicó el consejero de Economía, Hacienda y Seguridad, Javier González Ortiz, el descenso del IRPF supone una bajada para las rentas medias y bajas y un incremento para los tipos a partir de 53.407 euros.
El objetivo del Gobierno de Canarias es disminuir la carga tributaria a las rentas del trabajo medias y bajas, impulsar la creación de empleo y avanzar en la justicia tributaria. De esta forma, la mayor renta disponible de las familias generará más consumo y más actividad económica que, a su vez, se traducirá en más puestos de trabajo.
El Ejecutivo que preside Paulino Rivero incorpora esta modificación del IRPF en el anteproyecto de presupuestos autonómicos para el próximo año, que ascienden a 6.195 millones de euros a diferencia de los 6.353 millones de 2014, lo que supone un descenso de 158 millones y una reducción del 2,5%.
El consejero señaló que las próximas cuentas autonómicas estarán condicionadas por factores negativos como la rebaja del objetivo de estabilidad del 1% al 0,7% del PIB y el descenso de las transferencias estatales procedentes del sistema de financiación. Como factores positivos señaló la mejora de la situación económica y la rebaja de los costes financieros que se traducirá en importantes ahorros que se destinan a otras partidas del presupuesto.
Sobre el capítulo de ingresos, en 2015 se incrementará la recaudación de los impuestos indirectos en un 4,8% mientras que los directos lo harán en un 4,3%.
En relación a los gastos, y en consonancia con las prioridades establecidas por el Gobierno, el gasto social se incrementa un 1,2% en contraste con el descenso del 2,5% que registra el total del presupuesto. Además, aumenta en un 2,5% el peso que adquiere este gasto en el conjunto de las próximas cuentas públicas.
IRFP
González Ortiz destacó que con esta rebaja fiscal el Ejecutivo pretende corregir, en el ámbito de sus competencias, la pérdida de progresividad fiscal producida por la modificación del IRPF del Gobierno de España. En ese cambio estatal, las rentas bajas reducen su carga impositiva en menor medida que las altas.
Con este fin, se introducen dos nuevos tramos en el IRPF autonómico al ampliar los cuatro actuales a seis. Así, se incluye un tramo en la zona baja, hasta los 12.450 euros de base liquidable, al que se aplica un tipo impositivo del 9,5%. Por su parte, en la franja alta se establece un tipo del 23,5% a partir de los 53.407 euros y se fija un nuevo tramo desde los 90.000 euros en adelante al 24%.
Las rentas medias, según informó el consejero, también se benefician de esta rebaja fiscal al verse favorecidas por el efecto acumulativo que supone en sus declaraciones la bajada de los tramos más bajos.
Los cambios tributarios, en comparación con el IRPF vigente, se traducen en un 20% para las bases liquidables hasta 12.450 euros; más de un 14% para el tramo de hasta 17.707 euros; el 7% para los contribuyentes que declaren hasta 33.007 euros; y cerca de un 4% de reducción entre este último importe y los 53.407 euros. A partir de esta cifra es cuando cambia la tendencia y los porcentajes se incrementan.
Para González Ortiz, "estos porcentajes reflejan el sentido de los cambios impositivos que introduce el gobierno con el fin de aplicar, dentro de nuestra capacidad normativa, el principio de progresividad fiscal para que paguen más los que más tienen y menos los que menos tienen".
La nueva escala autonómica del IRPF contará con un tramo más que los cinco que establecerá el Estado. En todos los casos, los tipos impositivos canarios y las cuotas devengadas quedan por debajo de los estatales a excepción de las bases superiores a 53.407 euros.
Por otra parte, el consejero destacó que esta rebaja fiscal no tendrá efectos sensibles sobre la recaudación debido, por una parte, a la mejora económica que ya se ha iniciado y que se consolidará a lo largo de 2015 y, por otra, también por la mejora que se obtendrá al aplicar la mayor progresividad fiscal que se introduce en la tarifa autonómica.
