La Armada ha impedido este sábado que desde el buque de Greenpeace Artic Sunrise se realizaran acciones de protesta ante la llegada a aguas al este de Canarias del buque de Repsol que va a realizar prospecciones petrolíferas en la zona.

Una activista de Greenpeace, una italiana de 23 años -cuyo nombre sería Matilde, según se desprende del vídeo de los hechos difundido por los ecologistas-, ha tenido que ser trasladada por helicóptero hasta el Hospital Doctor Negrín de la capital grancanaria tras sufrir daños en una pierna.

Según la versión del Ministerio de Defensa, la mujer resultó herida al entrar en contacto con la hélice de una lancha de la propia organización ecologista tras caer al agua. Un efectivo de la Armada saltó al agua para rescatar a la activista, de nacionalidad italiana, y fue trasladada al patrullero Relámpago, donde fue estabilizada antes de su evacuación en helicóptero del SAR del Ejercito del Aire. La joven ya se encuentra ingresada en el Negrín, donde espera para ser operada; permaneció consciente y al parecer sus heridas no revisten una especial gravedad.

Greenpeace ha negado que las heridas sufridas por la activista hayan sido provocadas por las hélices de sus propias embarcaciones en la zona denominada 'Sandía', donde la compañía Repsol iniciará dentro de una semana sus investigaciones.

A través de un comunicado, la organización ecologista ha informado que tras lo ocurrido su barco Arctic Sunrise puso rumbo al puerto de Arrecife, en Lanzarote, donde esperaba atracar a las 19.00 horas del sábado.

Según Greenpeace, durante la protesta tres embarcaciones de la Armada Española, procedentes del patrullero de altura Relámpago, embistieron en repetidas ocasiones a las barcas neumáticas ecologistas, con el resultado de dos activistas heridos: la joven italiana y un hombre que regresó a bordo del Arctic Sunrise y también necesitaba tratamiento médico.

Greenpeace ha informado de que tras la intervención de la Armada, dos de sus barcas han quedado inutilizadas.

La organización ecologista ha puntualizado que sus embarcaciones disponen de un motor interno que hace imposible que el corte sufrido por la activista haya sido provocado por sus hélices, por lo que ha desmentido las afirmaciones realizadas en este sentido por el ministro de Industria, José Manuel Soria.

A pesar de que las "embestidas" de la Armada a las lanchas neumáticas hayan obligado la vuelta a puerto, Greenpeace ha anunciado que continuará defendiendo el medio ambiente y protestando de forma pacífica contra las prospecciones "con todos los medios a su alcance".

A punto de empezar los sondeos

El barco contratado por Repsol para realizar los sondeos, el Rowan Renaissence, ha llegado por la noche al punto denominado Sandía, al este de Lanzarote y Fuerteventura, en donde dentro de una semana planea comenzar la investigación.

La organización ecologista Greenpeace ha informado desde su página web que esta mañana envió tres lanchas hacia el buque perforador "para realizar una protesta pacífica", pero dos lanchas procedentes de un patrullero de la Armada las han interceptado.

He aquí la versión que ha dado el Ejército en un comunicado: "Poco antes de las 07.00 hora local el buque Artic Sunrise de Greenpeace arriaba tres embarcaciones que se dirigieron hacia el Rowan Renaissance con la intención de abordarlo. Dos embarcaciones del buque de la Armada Relámpago, presente en la zona, para garantizar la libertad de navegación, se han interpuesto para impedir dicho abordaje. En las maniobras subsiguientes una activista de la organización ecologista ha caído al agua resultando herida de consideración al impactar con las hélices de una de las embarcaciones de Greenpeace. La herida fue rescatada del agua por un miembro de la dotación del Relámpago, siendo trasladada al patrullero de la Armada donde se le ha estabilizado, procediendo a la evacuación al hospital por un helicóptero del SAR del Ejercito del Aire".

Greenpeace, por su parte, ha subido este vídeo de lo sucedido este sábado por la mañana: