El Servicio Canario de Empleo (SCS) mantendrá en 2015 el presupuesto de 11 millones que ha destinado en 2014 a ayudar, con políticas activas de empleo, a desempleados en situación de exclusión social, que representan el 10 % de los parados del archipiélago.

Tras reunirse con representantes de entidades sin ánimo de lucro que trabajan con este perfil de desempleados, la consejera regional de Empleo, Francisca Luengo, ha asegurado hoy que este año no mermará la partida destinada a ayudar a estos colectivos, un presupuesto que en 2014 rondó los 11 millones, de los que se beneficiaron unas 4.000 personas.

Luengo ha informado de que entre 2013 y 2014 han sido unos 7.000 los desempleados en situación de exclusión social que se han beneficiado de estas acciones, con las que se persigue que puedan integrarse en el mercado laboral tras superar una serie de itinerarios formativos, en los que la administración exige un compromiso de empleabilidad del 30 % de las plazas ofertadas.

Mujeres víctimas de violencia machista, reclusos en situación de tercer grado, toxicómanos que siguen programas de rehabilitación, personas con algún tipo de discapacidad, o perceptores de ayudas básicas son los beneficiarios tipo de estos programas de inserción laboral, con los se les facilita la adquisición de nuevas destrezas en competencias clave y su correspondiente certificado de profesionalidad, ha explicado la consejera.

El presidente de la Asociación Canaria de Empresas de Inserción (Adecan) y vicepresidente de la Red Anagos, Eduardo Calderón, ha informado de que son unas 150 entidades sociales sin fines de lucro las que trabajan con las ayudas que otorga el Gobierno canario para la promoción de la inserción laboral de las personas con discapacidad y en situación de exclusión social.

Calderón ha explicado que las entidades de Adecan son sociedades limitadas sin fines de lucro que cuentan con educadores en sus plantillas y que trabajan para insertar en el mercado laboral a personas en situación de exclusión social.