Apenas se han cumplido los primeros cien días de Gobierno regional y ya se ha plasmado el primer enfado del PSOE con su socio, Coalición Canaria (CC), a raíz de las declaraciones del presidente del Gobierno canario, Fernando Clavijo, sobre las disensiones internas que parecen estarse produciendo en el seno del socialismo del Archipiélago. Así, el secretario de Organización del PSOE en las Islas, Julio Cruz, fue claro y advirtió ayer al jefe del Ejecutivo autonómico, de que "tendrá una respuesta" por parte de los socialistas si prosigue en sus críticas contra los que son sus socios.

En este sentido, Julio Cruz rechazó que el PSOE canario tenga algún "problema interno" como deslizó el pasado lunes el presidente del Ejecutivo canario, e insistió en que hay una "dirección clara" y "las responsabilidades están delimitadas".

El portavoz socialista comentó que Clavijo tiene "materias más importantes" de las que ocuparse que la "vida orgánica del PSOE". "No es de recibo y hemos aguantado, pero a partir de ahora, cualquier tipo de declaraciones tendrá una respuesta del PSOE, porque no es el papel que debe ejercer un presidente de gobierno", resaltó.

No obstante, y pese a esta advertencia, el socialista señaló que el pacto de gobierno regional "goza de muy buena salud y aunque las críticas no enrarecen la relación entre ambos socios de gobierno", consideró que "no son convenientes, porque ayudan a iniciar una escala verbal" que el partido socialista ha tratado de evitar. "No es bueno entrar en aseveraciones o interpretaciones sobre la situación de otra fuerza política, porque no la conocen o se intentan ocultar otras razones", dijo.

Por su parte, el secretario de Organización de CC, José Miguel Ruano, restó hierro a este asunto y aseveró que "es normal" que se produzcan declaraciones públicas cuando "algo falla" en la confianza de los pactos y, por ello, matizó que el propósito "es que no haya que hacer declaraciones para recuperar la normalidad". Ruano confió en que el documento firmado ayer entre ambas formaciones políticas para revertir la situación de incumplimientos del pacto en diversas corporaciones, así como el pacto en el Ayuntamiento de La Laguna -rubricado ayer por la tarde- así como la ultimación de las negociaciones para el acuerdo en el Cabildo de Lanzarote supondrán un "avance importante para ir recuperando la tranquilidad". "Si la normalidad es el denominador común, no habrá necesidad de hacer declaraciones", insistió.

Cruz y Ruano comparecieron ante los medios de comunicación tras casi cinco horas de reunión de la comisión negociadora del pacto regional formada por CC y PSOE. Tras el encuentro, los secretarios regionales de Organización de ambas formaciones políticas afirmaron que el "pacto regional es un acuerdo sólido que pretende durar la legislatura entera". En dicho encuentro, también se trataron los incumplimientos del pacto que se han producido en diversas corporaciones locales e insulares donde socialistas y nacionalistas no llegaron a un acuerdo de gobernabilidad tras las elecciones del pasado 24 de mayo. En este sentido, ambas formaciones pretenden, según acordaron, solucionar dichos problemas antes de final de año.

Julio Cruz destacó que en la reunión se analizaron "todas las situaciones de los municipios en los que ha habido incumplimientos" del pacto en cascada fijado por las respectivas ejecutivas regionales para gobernar en la mayoría de las instituciones. Afirmó que ambas formaciones se comprometieron a "resolver los incumplimientos a corto y medio plazo".

En este sentido, avanzó que "hay situaciones que tienen que revertirse y alcaldes que tienen que cambiar, así como en otras corporaciones donde los equipos de gobierno están en minoría y deben buscar soluciones para garantizar la estabilidad política en dichos municipios con ambas fuerzas politicas".

Ruano fue más concreto y señaló que con dicho documento se pretenden revertir los incumplimientos en las corporaciones "con un plazo máximo de final de año".

La reunión también sirvió para que ambas formaciones firmaran el acuerdo de gobierno en el Ayuntamiento de La Laguna. Nicolás Jorge, concejal socialista en Granadilla de Abona y uno de los representantes del PSC en la comisión negociadora del pacto regional, y el secretario general de CC, José Miguel Barragán, fueron los encargados de rubricar el acuerdo de gobernabilidad para el municipio lagunero. Según José Miguel Ruano, Nicolás Jorge selló dicho documento "por encomienda de la Ejecutiva regional socialista".

Ni el secretario general de los socialistas laguneros, Javier Abreu, ni el alcalde, José Alberto Díaz (CC), estuvieron presentes en la formalización del acuerdo que les permitirá gobernar en minoría en el Ayuntamiento de La Laguna. Pese a este hecho, Ruano destacó que dicho pacto "es una buena herramienta para gobernar el municipio durante los próximos cuatro años".