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Entrevista.

José Ramón Montero: "El reparto de escaños está basado en la desconfianza y la manipulación"

"Ningún modelo electoral se ha modificado en Europa gracias a movimientos de la opinión pública", apunta el catedrático de Ciencias Políticas de la Universidad Autónoma de Madrid

José Ramón Montero: "El reparto de escaños está basado en la desconfianza y la manipulación"

¿Hay algún sistema electoral perfecto?

No. Todos tienen un defecto. Los sistemas electorales en el mundo son infinitos. Existen tres familias: la de los mayoritarios, como Estados Unidos, Reino Unido y Francia; los mixtos, como Alemania, que está de moda; y la familia de los proporcionales, que es donde se mueven en España y la mayoría de los sistemas europeos y latinoamericanos. Pero la proporcionalidad es enormemente flexible y hay países que no son nada proporcionales y otros como Holanda, Israel y Bélgica que sí lo son.

¿Cuáles son los principales fallos del sistema canario?

El sistema electoral canario es peculiar, está basado en la desconfianza entre las Islas y la manipulación, que consiste en usar una serie de elementos para producir un determinado resultado. El modelo canario se caracteriza por contar con el mejor invento mostrado por las élites políticas para tener ventaja sobre sus contrincantes. La triple paridad es el invento más ingenioso que existe para manipular el sistema, porque el 17% de la población de las islas no capitalinas elige al 50% de la representación en el Parlamento regional, mientras que el 83% de la población de las dos islas mayores tiene el otro 50% de escaños. Es un caso único y por eso es el primer territorio del mundo con mayor desviación. Entonces el principal fallo es que el sistema es poco representativo de la pluralidad demográfica de los canarios.

¿Es antidemocrático?

No, pero repercute en la calidad de la democracia en Canarias, que resulta negativa o defectuosa.

¿Cómo es posible reformar un sistema electoral?

Desde 1946 en más de 40 países se han realizado 20 grandes reformas y 40 reformas pequeñas. Ello ha sido posible gracias a una serie de condiciones: cuando el primer o los dos principales partidos tienen posibilidad de una derrota y cambian el sistema electoral para beneficiarse, así ha ocurrido en Francia y Europa del Este. Otra posibilidad es que en un gobierno haya divisiones internas o dentro de un partido. También puede ser por el precio del optimismo, cuando se cree que con el cambio se va a ganar; o se piensa en la ventaja a largo plazo, cuando se transige por oír a la opinión pública; o bien se reforma porque se quiere más democracia, como ocurre en los países nórdicos.

En Canarias no ocurre así.

No. En cambio, por ejemplo en Holanda temen que si no se cambia el sistema van a ser perseguidos y castigados por los electores.

¿La movilización social sirve de algo?

Ningún sistema electoral se ha modificado en Europa cuando ha habido grandes movimientos de la opinión pública. Lo siento. Pero sí se han modificado cuando los ciudadanos han advertido a los partidos que si no cambian el sistema se les va a castigar en las urnas. La movilización ciudadana es necesaria, pero no suficiente. Sin participación los políticos se creen que todo es Jauja, pero cuando hay movilización los políticos se preocupan porque algo está pasando.

Aquí se castiga en cada cita electoral a Coalición Canaria, pero siguen gobernando.

Sí, porque el sistema electoral lo facilita.

¿Mientras CC esté en el Gobierno no permitirá la reforma?

Exactamente. Me temo que a corto plazo no se cambiará el sistema. Ha cambiado el gobierno, pero Coalición es socio natural.

¿Cómo convencería a las islas periféricas para que no teman una reforma electoral que pudiera mermar sus diputados?

Haciendo valer su voto. El problema del herreño o lanzaroteño no es que tenga un diputado o cinco sino qué relaciones tiene con el diputado. Me da la impresión de que no son distintas de las que tiene el tinerfeño y el grancanario, que no sabe quién es la persona que le representa.

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