"Jhonander tiene una estrella". Eran las palabras pronunciadas por Magaly Alemán Hernández el 20 de marzo de 2014, pocas horas después de conocerse el siniestro que acabó con la vida de cuatro tripulantes del Servicio de Búsqueda y Salvamento (SAR) con base en Gando y del que logró sobrevivir el teldense Jhonander Ojeda Alemán. Palabras premonitarias ya que un año y siete meses después este joven militar ha nacido por segunda vez en unas circunstancias similares.

A Jhonander le sonríe la diosa Fortuna. En el accidente del 19 de marzo de 2014 el joven teldense logró salir de la aeronave al estar junto al ojo de buey de la aeronave situado en su parte posterior, lo que le salvó la vida, ya que sus cuatro compañeros se quedaron atrapados en el interior del Super Puma que se hundió en las aguas del Atlántico a 31 millas al suroeste de Morro Jable y 34 al este de Vecindario. El único superviviente pudo mantenerse a flote en el mar hasta que fue rescatado sin que se pudiese hacer nada por el resto de la tripulación.

El susto, la conmoción y la angustia por lo ocurrido con sus compañeros quedaron grabados en la mente de este sargento, mecánico de vuelo, en ese momento con 220 horas de vuelo y militar desde los 19 años. El propio ministro de Defensa, Pedro Morenés, aseguró en Gando que Ojeda fue "afortunado" al poder salvar su vida: "es un soldado íntegro y una persona de gran valía, nos hemos dado un abrazo", señaló el titular de Defensa.

Ahora, un año y siete meses después, el joven vecino de La Garita ha vuelto a protagonizar un accidente también en alta mar, aunque esta vez cerca de aguas africanas. Ahora la fortuna ha sonreído a los tres integrantes de la aeronave incluido el sargento que, junto con sus compañeros, fueron rescatados desde su balsa por un pesquero marroquí.

"Todos los miembros de este escuadrón del SAR y sus compañeros han participado en numerosas misiones de rescate, han salvado a muchos, es un gran grupo. En cambio, esta vez le toca a mi hijo, un salvador que es salvado, es una situación contradictoria. Él tiene una estrella, son momentos duros para todos", decía Magaly Alemán porque su hijo no quiso hablar con los medios de comunicación al estar muy afectado por lo sucedido.

El accidente del Super Puma del SAR el 19 de marzo de 2014 conmocionó a toda la sociedad isleña durante varios días debido a las circunstancias del accidente y por las dificultades que ocasionó el rescate de los cuerpos de los cuatro fallecidos en el siniestro: Daniel Pena Valiño, Carmen Ortega Cortés, Sebastián Ruiz Galván y Carlos Caramanzana Álvarez. La situación del helicóptero, a 2.000 metros de profundidad, supuso una larga operación que estuvo salpicada por el malestar de los familiares de los fallecidos ante la tardanza del rescate.

El suceso se produjo por la noche, cerca de las 22.00 horas, cuando los cinco militares que viajaban en el helicóptero realizaban unas prácticas nocturnas junto al barco Meteoro de la Armada española.

El ejercicio consistía en un amerizaje controlado por la aeronave en alta mar. Fue la propia tripulación del buque de la Armada la que inició las labores de rescate y pudieron salvar a Johnander Ojeda, que estaba flotando en el mar mientras la aeronave se hundía con sus compañeros. El joven militar residente en La Garita no realizó declaraciones en ningún momento, ni siquiera cuando se celebraron los funerales por los cuatro fallecidos en la Base Aérea de Gando. Ahora, tras este nuevo accidente del que ha salido ileso, está por ver cuál será el impacto psicológico sobre Johnander.