Los sindicatos UGT y CCOO exigen valentía al Gobierno de Canarias para implantar la tasa turística, aumentar el tramo autonómico del IRPF para rentas altas y el IGIC para artículos de lujo, pues a su juicio los "inútiles" presupuestos para 2016 mantienen la desigualdad social.Los secretarios generales de ambos sindicatos, Gustavo Santana (UGT) y Carmelo Jorge (CCOO), coincidieron en rueda de prensa en criticar el proyecto de ley de Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma para 2016 a pesar del "loable" incremento en más del 12% en las áreas sociales.

Ambas fuerzas sindicales consideran que éste es un esfuerzo claramente insuficiente que se agrava por el hecho de que otras medidas incluidas en el proyecto "vacían de contenido" el impacto que pueda tener este incremento, ya que tanto UGT como CCOO se muestran "radicalmente en contra" de aumentar la exención fiscal. La ley de presupuestos puede ayudar a corregir los efectos más perversos de la crisis y servir de palanca para la recuperación económica pero, según advirtió el dirigente regional de CCOO, Carmelo Jorge, el proyecto presupuestario para 2016 "vuelve a ser una renuncia" a cumplir este objetivo y generará los mismos niveles de desigualdad.

Gustavo Santana, de UGT, percibe en el proyecto la misma renuncia tácita a orientar el desarrollo económico y social de las islas en los próximos años y criticó datos como el que en la memoria explicativa de los presupuestos no se cite ni una sola vez la lucha contra el fraude fiscal y la economía sumergida.

"El Gobierno no tiene una hoja de ruta clara contra el desempleo, la pobreza y la desigualdad", afirmó Santana, quien dijo que las propuestas conjuntas de ambas fuerzas sindicales para modificar los presupuestos serán entregadas por escrito esta tarde en la reunión del Consejo Asesor del Presidente, y posteriormente se remitirán a los grupos con representación en el Parlamento de Canarias.

UGT y CCOO sostienen que hay que modificar el capítulo de ingresos para dotar de recursos a las políticas de igualdad y de crecimiento "abandonando el axioma de que el control del gasto es el problema de las cuentas autonómicas y de la sociedad canaria". Por ello rechazan que en vez de disminuir las exenciones fiscales se aumenten con la anunciada sobre el impuesto de sucesiones y donaciones, lo que el Gobierno regional intenta compensar con un incremento del impuesto sobre el tabaco "cuyos efectos sobre el empleo en el sector serán mayores que el supuesto efecto disuasorio" de la medida, afirman.

Los sindicatos piden que las exenciones fiscales previstas por el Gobierno regional superan los mil millones de euros, el 18% del presupuesto autonómico, mientras que Carmelo Jorge insistió en que no puede haber justicia social sin tocar la fiscalidad. Al respecto, Gustavo Santana exigió al Ejecutivo canario "valentía" para implantar la tasa turística ya que los empresarios del sector "de forma egoísta e insolidaria" han anunciado un incremento en el precio del paquete turístico ante la previsión de ocupación plena en la temporada invernal.

Según el cálculo que han realizado, con la previsión más modesta de ingresos -una tasa turística de uno o dos euros- Canarias podría recaudar entre 100 y 115 millones de euros. Además los dirigentes sindicales han pedido que se incremente el tramo autonómico del IRPF para las rentas superiores a los 60.000 euros y que se modifique el Impuesto General Indirecto Canario (IGIC) con el incremento en los tipos 1 y 2 sobre artículos de lujo, al tiempo que proponen reducir hasta el mínimo legal el que grava los artículos considerados de primera necesidad.

En el capítulo de gastos piden aumentar el asignado a sanidad y educación, pues "no hay ninguna razón ni económica ni moral" para que no se incrementen ambas áreas como mínimo en el mismo porcentaje de aumento de los presupuestos autonómicos, añadió Carmelo Jorge. También proponen crear un centro logístico de compras que "racionalice" el gasto en toda la administración pública autonómica y que haya "vigilancia" del nivel de endeudamiento de las empresas y fundaciones dependientes del Gobierno de Canarias que, según Jorge, no pueden convertirse "en un retiro dorado" ni servir para mantener con dinero público "las alianzas políticas".