Los delitos y falta cayeron ligeramente en Canarias en 2015 en comparación con el año anterior. Sin embargo, sí se produjo un incremento de los homicidios y asesinatos. Especialmente significativas son las cifras en la provincia de Las Palmas, con un aumento del 150%, lo que supuso 15 crímenes frente a los seis del año 2014. Según las cifras publicadas por el Ministerio del Interior, han mejorado las estadísticas de los robos en domicilios y la sustracción de vehículos.
Los índices de criminalidad suponen un barómetro anual de la evolución de la seguridad ciudadana. A nivel nacional hay un descenso global del 3%, con bajadas en todas las comunidades autónomas a excepción de Murcia. Las estadísticas proceden de todos los cuerpos policiales del Estado, las policías autonómicas y las polícias locales.
En Canarias en 2015 se produjeron 20 homicidios dolosos y asesinatos consumados frente a los 12 del año anterior, lo que supone un 66,7% más. La balanza de esta situación empeora en la provincia de Las Palmas con 15 crímenes, nueve más que el año anterior, un 150% de incremento. En la provincia de Santa Cruz de Tenerife hubo un crimen menos que en 2014, de seis a cinco, lo que supone porcentualmente un 16,7% de descenso.
Por islas, en las tres de la provincia oriental se duplicaron los homicidios y asesinatos. En Gran Canaria de cinco a diez, en Fuerteventura de cero a dos y en Lanzarote de uno a tres. En los municipios mayores de 50.000 habitantes San Bartolomé de Tirajana, Telde, Santa Lucía y Arrecife registran incrementos de crímenes, mientras que en Las Palmas de Gran Canaria caen un 40%.
Robos y hurtos
Las cifras globales aportadas por la Secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio del Interior reflejan una ligera reducción de la cifra global de delitos y faltas en Canarias del 0,6%, lo que en números absolutas supone 89.550 delitos frente a los 90.133 de 2014. Por provincias sí hubo un incremento del 1,9% de la inseguridad en la provincia occidental frente a la oriental, donde cayó un 2,8%.
Las principales caídas se produjeron en aquellos delitos y faltas que más preocupan a los ciudadanos por ser más cercanos y afectarles directamente, es decir, robos con violencia e intimidación, robos con fuerza en domicilios, sustracción de coches y los hurtos. Hubo ligeros incrementos en el tráfico de drogas y en los daños.
En la provincia de Las Palmas hay un descenso significativo del robo con violencia e intimidación de un 14,9%, pasando de 918 a 781. Sin embargo, sí se incrementa un 2,8% los robos con fuerza en domicilios y el tráfico de drogas sube hasta un 4,9%, con un total de 344 delitos frente a los 328 de 2014.
De los datos correspondientes a las dos capitales del Archipiélago destaca el hecho de que los robos con violencia e intimidación bajaron en Las Palmas de Gran Canaria un 28,7%, mientras que se incrementaron en casi la misma proporción, un 28 %, en Santa Cruz de Tenerife.
Sin embargo, en la capital tinerfeña los robos con fuerza en domicilios disminuyeron un 12,7%, mientras que en la grancanaria este tipo de delitos se incrementaron un 22,1%.
La sustracción de vehículos a motor bajó en ambas ciudades, más en Santa Cruz de Tenerife, un 19,6 %, que en Las Palmas de Gran Canaria, donde el descenso fue del 9,8 %. Mientras que los hurtos aumentaron un 17,2 % en la capital tinerfeña, en la grancanaria este incremento fue del 1,7 %.