La secretaria general de Podemos en Canarias, Meri Pita, denunció ayer que la diputada de su partido Victoria Rosell "es objeto de una persecución impresentable e intolerable en un Estado de derecho".

Pita sostiene que los "ataques" contra Victoria Rosell se enmarcan en "una campaña brutal contra Podemos", que ella atribuye al miedo a que sus representantes lleguen al Gobierno, posibilidad ante la cual reciben "una paliza brutal en los medios de comunicación".

A su juicio, hay sectores políticos que están en campaña electoral y "utilizan mecanismos de poder para ensuciar y enfangar, que es lo que habitualmente hacen en política".

Pita se mostró preocupada "y casi asustada de que determinados poderes públicos se pongan al servicio de determinados poderes políticos, que están con una intención manifiesta de machacar a una ciudadana que se presenta y es candidata y diputada por Podemos". "Algunos que se manejan muy bien en el mundo del fango político pretenden ensuciar, y no van a poder, la imagen de Victoria Rosell, y su trayectoria como juez deja muy clara y evidente su lucha contra la corrupción y contra todo lo que supone ella en Canarias", aseguró la secretaria general de Podemos en Canarias durante una rueda de prensa.

Pita cree que ese es el objetivo de determinados sectores políticos que "se sienten preocupados por su presencia y, quizás, por su [posible] asunción del Ministerio de Justicia". El líder de Podemos, Pablo Iglesias, la postuló para ese cartera durante la campaña electoral en caso de que su partido llegase al Ejecutivo.

"Es de juzgado de guardia" y "estamos realmente preocupados, estamos alarmados", apuntó la líder de Podemos en Canarias.

La secretaria general del partido en las Islas precisó que estudian posibles acciones legales, aunque también considera que "en el proceso de acoso y derribo" que, a su juicio, mantiene el ministro de Industria y líder del PP canario, José Manuel Soria, "contra Victoria Rosell, las cosas han ido poniéndose en su sitio".

Pita llamó la atención sobre el hecho de que el periódico LA PROVINCIA publicase ayer la transcripción literal de la declaración que el empresario Miguel Ángel Ramírez hizo hace unos días ante el Juzgado de Instrucción número 8 de Las Palmas de Gran Canaria, el mismo que dirigía hasta octubre Victoria Rosell.

En esa declaración, Ramírez reconoce que él y otros empresarios financiaron hace tiempo proyectos empresariales de la actual pareja de Rosell, el periodista Carlos Sosa.

La Fiscalía de Las Palmas intentó averiguar si Rosell había actuado en esa instrucción, que investiga a Ramírez por posibles fraude a la Seguridad Social y Hacienda, condicionada por intereses personales de su pareja, en unas indagaciones que luego fueron archivadas por el Consejo General del Poder Judicial y el Tribunal Superior de Justicia de Canarias.