El Gobierno de Cabo Verde ha anunciado este martes su decisión de apoyarse en España y Portugal para estrechar sus relaciones económicas e institucionales con la UE, aprovechando los intereses que comparte en diferentes ámbitos con los archipiélagos atlánticos de Canarias, Azores y Madeira.

El primer ministro de Cabo Verde, José Ulisses Correia, y el presidente de Canarias, Fernando Clavijo, han formalizado hoy el comienzo de una nueva etapa de colaboración entre los dos archipiélagos, en una cumbre celebrada en Praia en la que también ha estado presente la embajadora de España en el país, Caridad Batalla.

Canarias y Cabo Verde, que ya comparten 42 proyectos comunes financiados por la UE en el programa MAC (siglas de Madeira, Azores y Canarias), han expresado hoy su interés de que, a medio plazo, se pueda dotar de una personalidad jurídica propia a la región de la Macaronesia, en la forma que España, Portugal y Cabo Verde consideren oportuno, pero con el objetivo de darle voz internacional y de abrir ámbitos de colaboración entre los archipiélagos.

"Cabo Verde no pertenece a Europa, aunque puede ser una extensión de la UE si Azores, Madeira y Canarias están interesados en asociarnos a sus proyectos", ha explicado Correia, en la rueda de prensa que ha ofrecido junto a Clavijo al término de la cumbre.

El presidente canario ha resaltado, por su parte, que la asociación entre los cuatro archipiélagos atlánticos no solo acerca a Cabo Verde a Europa, sino que también ofrece a la UE un socio privilegiado para encauzar sus relaciones económicas con África Occidental, una región en pleno crecimiento.

De hecho, ese es uno de los principales contenidos que pretenden darle al futuro organismo de representación de la Macaronesia, que además serviría para encauzar las relaciones entre los cuatro archipiélagos y para promover proyectos comunes en ámbitos de especial relevancia para las islas, como las energías renovables o la "economía azul" (todos los sectores ligados al mar).