Valencia acaparó premios en el sorteo del Niño de ayer. El primer sobresalto llegó con el tercero, al número 85073, a las 12.16 horas. Agraciado con algo más de 11 millones de euros, se había vendido en la administración número 2 de la localidad valenciana de Benetússer. Pero la explosión llegó apenas ocho minutos después, cuando los niños de San Ildefonso cantaron el primer premio, el 08354 y dotado con 90 millones de euros y que viajó bien poco: vendido íntegramente en la administración número 3 de Torrent, también en Valencia. La comunidad autónoma vio así compensado el fiasco del último sorteo de Navidad, en el que el Gordo pasó de largo por tierras valencianas.

Las 45 series del número 8.354 se vendieron en la administración número 3 de Torrent, aunque la mayoría de los billetes (35 series) fueron adquiridos por la Hermandad del Santo Sepulcro, que estaba abonada a este número desde hace 34 años.

Fueron 70 millones de euros los que repartió esta cofradía de la semana santa torrentina a través de unas 2.900 participaciones que fueron adquiridas por los miembros de esta hermandad y centenares de vecinos y simpatizantes.

Un representante de la Hermandad del Sepulcro explicó que el colectivo compra lotería en la administración que repartió el premio desde que abrió sus puertas en 1982 y aunque están abonados a este número para todos los sorteos, en otras ocasiones solo les ha tocado la devolución del dinero, pero en esta ocasión ha sido el número ganador.

La Hermandad del Santo Sepulcro, fundada en 1930, cuenta con 700 hermanos y es la impulsora del museo de la Semana Santa de Torrent, una ciudad de 80.000 habitantes del área metropolitana de Valencia.

La regente de la administración, María José Sanfélix, explicó que las otras diez series del primer premio se han vendido en ventanilla. "Es el regalo más grande del mundo", destacó.

María José Sanfélix, quien confesó que aunque no quería escuchar el sorteo porque "nunca sale nada", al final se decidió hacerlo y de esa forma supo que su oficina había vendido íntegramente el primer premio.

Sanfélix explicó que la administración la abrió su madre en 1982, hace 34 años, y se la pasó a ella en 2006, aunque hasta ayer no habían dado ningún premio del sorteo de Navidad ni del Niño. "Hemos vendido todo el primero, los 450 décimos, y se ha repartido especialmente a la Hermandad del Santo Sepulcro y a particulares", señaló la administradora. A sus 90 años, Amparo Masilla pudo ver cumplido su sueño desde que abrió la administración número tres en la Avenida del Vedat de Torrent, entregar un gran premio de la lotería. "No me quedé ningún décimo pero estoy igual, o más, contenta que si me hubiera tocado por haber hecho tan feliz a tanta gente".

Fueron sus dos hijas, María José e Inmaculada, las que llevan ahora la administración, quienes la abrieron al mediodía después de conocer la feliz noticia. "Lo mejor es que ha sido muy repartido en papeletas por todo el pueblo", reconoció María José Sanfélix.

Los gritos de júbilo de los vecinos que se iban acercando a la administración, el claxon de los coches al pasar y las botellas de cava no dejaban lugar a la duda. Torrent fue durante el día de ayer la ciudad afortunada a la que los Reyes de Oriente dejaron como regalo el Niño más deseado.

Una de las familias premiadas fue la Alemany. "Para tapar agujeros y con lo que sobre nos daremos una alegría", explicaba la abuela. Ana, una de sus nietas, de siete años, veía ayer más cerca su deseo de ser fallera mayor.

"Vivimos de alquiler y por fin nos vamos a poder cambiar de piso", explica Santiago, con una sonrisa en el rostro después de conocer el pellizco que le había tocado. Para otras, como Amparo, quien le compró una participación a su compañera ayer a última hora, este dinero asegura que le va servir para pagar el arreglo del coche.

El alcalde de Torrent, Jesús Ros, se apresuró a felicitar a los premiados en cuanto conoció la noticia.