Podemos se opone a la que los capellanes que prestan servicio en los hospitales públicos del Archipiélago reciban un sueldo de la Comunidad Autónoma. "Si se quieren curas" en los centros sanitarios "que los pague el Obispado", reclamó ayer el diputado Francisco Déniz en una pregunta al consejero de Sanidad, José Manuel Baltar, en la que le inquiría sobre la nómina de esos 19 sacerdotes.

Aunque el consejero aseguró que los salarios están alrededor de 900 euros mensuales, el diputado de Podemos contradijo esos datos y elevó los sueldos a 1.349 euros al mes, dinero que en su opinión, debería estar destinado a otros fines como nuevas contrataciones sanitarias o al programa de atención temprana.

Tampoco le sirvieron al representantes de la formación morada las explicaciones de que el mantenimiento de estos sacerdotes se debe a un convenio firmado entre los ministerios de Justicia, Sanidad y la Conferencia Episcopal Española en los años ochenta del pasado siglo y que, por tanto, Canarias no puede saltarse de forma unilateral las normas firmadas en este acuerdo.

Además de ello, varios de los 19 capellanes tienen vinculación laboral con los hospitales en los que trabajan y se refirió a la asistencia que también presta un pastor de la Iglesia Evangélica así como representantes de otras religiones que así lo piden.

Déniz insistió en que Sanidad no debería pagar a los capellanes y reclamó que ese dinero se destine a otras necesidades. Se trata, dijo "de un sueldo considerable", y preguntó al pleno si la "gente en paro se tiene que meter a capellán para cobrar ese sueldo".

El diputado en el Parlamento canario sigue así la estela apuntada desde el Consejo Ciudadano estatal de Podemos, algunos de cuyos miembros han reclamado, además de acabar con las misas en Televisión Española, quitar también los capellanes de las unidades militares. La formación morada busca, con estas críticas, el desarrollo de "una ley de libertad religiosa".

Julio Rodríguez, ex jefe del Estado Mayor de la Defensa, ha afirmado al respecto que aunque es un servicio que hay que prestar "igual habría que abrirlo a otras confesiones".