Partida de ping-pong político entre el Gobierno central y Nueva Canarias (NC) a cuenta de los apoyos a los Presupuestos del Estado para este año. A pocos días de que ambas partes se sienten a negociar el posible respaldo del diputado nacional de esta formación, Pedro Quevedo, al proyecto cuya tramitación va a iniciarse en la Cámara baja, cada una de las partes insisten en apuntar hacia la otra como última responsable del futuro de las cuentas y por ende de la estabilidad política y de la legislatura.

Si en el debate de la semana pasada en el Congreso, Quevedo trató de dejar la pelota en el campo del titular de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, responsabilizándole en última estancia a él de la aprobación o no de los Presupuestos para el 2017, ayer fue el ministro quien respondió al golpe señalando a NC como el elemento clave para propiciar unos nuevos Presupuestos, y por ende una mejora sustancial de las inversiones y la financiación autonómica en las Islas para lo que queda de año.

Aunque Montoro incluyó ayer al PSOE y a los demás grupos políticos con presencia en Canarias en el paquete de quienes deben asegurar unos nuevos Presupuestos según él ventajosos para las Islas, su referencia directa aunque implícita a NC fue clara. El pasado jueves Quevedo le espetó a Montoro que él era "el verdadero diputado número 176", y ayer este se deshizo de la atadura para tratar de anudar a ese compromiso al diputado nacionalista. Y lo hizo además en aparente connivencia con CC, aprovechando una oportuna pregunta de la senadora autonómica de esta formación, María del Mar Julios, en una sesión de control en el pleno de la Cámara alta, en la que además la formación canaria y el Gobierno escenificaron que su pacto va más allá de los nuevos Presupuestos y tiene como horizonte toda la legislatura.

Tras responder a Julios que el Gobierno tiene intención de continuar plasmando en los Presupuestos de los dos próximos años el desarrollo de la agenda canaria -"y eso no crea agravio respecto a ninguna comunidad autónoma", dijo-, enseguida viró sus argumentos hacia la necesidad de que para ello es imprescindible que se sumen nuevos apoyos a los ya obtenidos por el Ejecutivo central. "Si no asentamos la estabilidad política vamos a perder una gran oportunidad todos", resaltó el ministro.

Julios también se refirió a la importancia que para Canarias tendrá el que se apruebe el actual proyecto presupuestario "porque la alternativa, la prórroga de los actuales, sería nefasto" para las Islas, y ponía ella también de esta forma la pelota en el campo de NC para que los apoye.

Tras recordar que Canarias había sido una de las comunidades "más castigada por la crisis y por los recortes del Gobierno del PP", razón por la que CC se había opuesto a los anteriores Presupuestos del PP, mencionó los acuerdos alcanzados para el desarrollo de la agenda canaria y cuyo primer soporte económico y financiero ya aparece en las cuentas hoy en tramitación. Mencionó, en ese sentido, que el proyecto contempla la exclusión de los recursos del REF del sistema de financiación y que se traduce en 220 millones más este año para sanidad, educación y servicios sociales, así como el inicio de la recuperación de los convenios de infraestructuras Canarias-Estado "gravemente mermados".

En referencia irónica a las declaraciones de Montoro sobre la "borrachera de gasto público" en las administraciones antes de la crisis, Julio aseguró que "ni el Gobierno canario ni las administraciones canarias se han emborrachado de gasto público; por el contrario, nos hemos saturado de responsabilidad". "Ahora sería imperdonable no resolver los importantes asuntos pendientes que el Estado tiene con Canarias, es urgente mejorar la calidad de vida de los canarios y esa recuperación necesita estabilidad para generar confianza", recalcó.