¿Es el Baskonia un modelo de integración de los eSports en las estructuras de un club de deporte tradicional?

Dicen que cada uno llega a su destino por diferentes vías, nosotros escogimos este modelo que puede tener sus ventajas o inconvenientes, pero no tiene por qué considerarse un ejemplo a seguir. En nuestro caso, el director general conocía muy bien el sector y por ello comenzamos a interesarnos y hace dos años optamos por un equipo profesional para competir en las ligas nacionales.

¿Y cómo funciona esta división de eSports?

La forma de trabajo y la creación del equipo son exactamente iguales a la formación de una división de cualquier otro deporte. La diferencia en muchos de los juegos es que cada jugador entrena desde su casa, con la excepción del League of Legends en donde sí que tenemos una Gaming House en la que conviven y entrenan los jugadores. Aunque los eSports ya llevaban unos años en España, nosotros llegamos en un momento en el que comenzaban a tener más repercusión y ahora que ya están entrando otros clubes, contamos con la experiencia de llevar varias temporadas en el sector, algo que en un mundo tan camb iante es muchísimo tiempo.

¿Qué diferencia al Baskonia Atlantis, el equipo con el que comenzaron, del Baskonia actual?

La evolución es la habitual en los eSports, antes el juego era muy amateur, hoy en día la mayor parte de los equipos de League of Legends en división de honor tienen Gaming House, la liga es mucho más potente y los patrocinadores son marcas más importantes. Con el crecimiento del sector lo que cambia es la profesionalización, el tamaño de las ligas y el número de juegos en las competiciones. Actualmente tenemos cuatro equipos y estamos abiertos a crear más si al club le resultan interesantes.

¿Quién decide cómo se estructura una competición oficial de eSports?

Los publishers o dueños de los juegos suelen tener acuerdos con ligas regionales y son estas empresas privadas las que obtienen los derechos para organizar las competiciones. Por eso, el publisher tiene poder de decisión sobre las condiciones de los torneos, tanto en el sistema de juego como en si tienen cabida las apuestas deportivas o la venta de bebidas alcohólicas en los recintos. Es un mundo muy cambiante que nos obliga a estar atentos a lo que el futuro nos pueda deparar. El fútbol es fútbol y lo seguirá siendo siempre. En los eSports hoy es League of Legends, CS:GO o Hearthstone y mañana igual es cualquier otro juego.

¿Cómo han reaccionado los seguidores habituales del club ante la creación del Baskonia eSports?

Para los más mayores que no entienden muy bien en qué consiste, es sólo una anécdota, pero para los más jóvenes nuestra división sí que tiene un valor diferencial. De hecho, algunos seguidores nos han conocido a través de los eSports y no por el baloncesto y otros que saben que somos un club de baloncesto, pero lo que les interesa son los deportes electrónicos. Desde el club, se hace una labor de divulgación similar en todas las divisiones, pero los aficionados son los que saben qué les interesa y qué no.

¿Qué componentes tiene el cuadro técnico del Thunder X3 Baskonia?

Contamos con un director deportivo y un entrenador, un analista que informa sobre las estadísticas propias o de los equipos ante los que vamos a competir. Y además, al ser un club deportivo tenemos nutricionistas y fisioterapeutas que son comunes a todas las divisiones.

¿Y qué diferencias existen entre un fichaje de un equipo tradicional y uno de eSports?

Es la parte en la que más se parecen los deportes tradicionales y los eSports. Existe la figura del director deportivo y entrenador que proponen los fichajes de jugadores o las renovaciones. El club se pone en contacto con ellos y llega a un acuerdo de contratación por el que se incorporan al equipo.

Y cuando los seleccionados son menores de edad, ¿cómo se enfrentan los padres a esta nueva profesión?

A los padres les cuesta entender que quieran ser jugadores profesionales, pero exactamente de la misma manera que les cuesa asimilar que su hijo quiera ser artista, futbolista o torero. Hay jugadores que contratamos muy jóvenes, pero son ellos mismos los que lo gestionan con sus familiares. Entendemos que a los padres también les aporta tranquilidad saber que existe una entidad deportiva detrás de los equipos y que los chicos estarán en mejores manos.

¿Se puede ser deportista de eSport y mantener un estilo de vida saludable?

Intentamos que los jugadores, y sobre todo los que tenemos en la casa conviviendo, que tengan un comportamiento de deportistas, igual que el que tendría un jugador de otra disciplina. Es cierto que no necesitan estar tan en forma como en otros deportes, pero el nutricionista del equipo vigila su alimentación y se intenta que hagan ejercicio físico. Los eSports no son una actividad puramente física, así que igual que en deportes como el ajedrez, aquí podemos encontrar jugadores más sedentarios y otros que son más conscientes de lo que su cuerpo necesita.

¿Cree que los eSports serán una salida profesional a valorar por los jóvenes en el futuro?

No sólo en el futuro, yo creo que ya es una salida profesional para muchos jóvenes. Puede que lleguen juegos diferentes o puede que estén los mismos juegos, pero seguro que habrá más competiciones y más ligas en las que participar porque los espectadores también tienen más interés. Eso también atraerá a más marcas al sector. ¿Serán más importantes que el fútbol? Es algo que no podemos saber ahora, sólo el tiempo lo dirá, pero el crecimiento es sólido y sostenido por lo que todo invita a pensar que seguirá en esa senda.

Y el sector público, ¿qué papel tiene ahora mismo?

Creo que podría contestar casi con total seguridad que ninguno. En las ligas profesionales y en los equipos no existe inversión pública. Puede que los Ayuntamientos hagan alguna aportación en el apoyo a eventos concretos muy locales, pero el papel que tienen es testimonial.

Mañana [por hoy] debatimos sobre la inclusión de los eSports en la Ley Canaria del Deporte, ¿qué le parece la propuesta?

Actualmente los eSports son desde el inicio un producto de internet. Las partidas se juegan a través de la red, las retransmisiones se realizan online y los espectadores siguen los partidos a través de Twitch por lo que las televisiones públicas tampoco tendrían cabida. Los Millenials ya no ven la televisión como la veíamos nosotros. Sería necesario una regulación para los eSports, pero no es necesario el reconocimiento como deporte para que el sector pueda seguir adelante o pueda funcionar correctamente. Aunque existen temas que podrían ser objeto de debate, como la restricción de la venta de bebidas alcohólicas, ahora lo están gestionando los dueños de los juegos que son los que toman las decisiones finales. Las ligas también ponen una serie de condiciones para que los equipos puedan participar exactamente igual que lo hace la ACB. En el caso del Baskonia los jugadores están contratados como trabajadores asalariados y eso no va a cambiar si los reconocen como deportistas.

Y las ligas profesionales de eSports pertenecen a empresas privadas.

En España sí, la Liga de Videojuegos Profesional y la ESL que son las más importantes pertenecen a empresas privadas y cualquier otra empresa podría crear una competición si llega a un acuerdo con los dueños del juego. La primera condición para que estas ligas funcionen es que la gente lo vea, si no hay espectadores no hay eSport.

¿Qué necesita un juego para convertirse en un eSport?

Esa es la pregunta que todos los publisher querrían saber. Muchos han intentado que sus juegos tengan éxito y algunos lo consiguen y otros no. La estrategia de marketing de los propietarios, los torneos que organizan e incluso los premios que ofrecen afectan al número de jugadores. ¿Por qué hay deportes como el fútbol que ven millones de personas y otros como el voleibol o la lucha canaria, que son igualmente interesantes, tienen mucho menos alcance? Los eSports deben requerir estrategia y habilidades, que el punto de vista de la cámara permita retransmisiones interesantes que atraigan a los espectadores, y sobre todo que los jugadores tengan una influencia importante en el resultado. Si el resultado depende en gran parte de la suerte, es más difícil que consiga triunfar en los eSports. Todo esto es la teoría. No hay nada probado y no podemos saber cómo serán los eSports en el futuro. Lo que sí sabemos es que se necesitan muchos jugadores y muchos seguidores para que un videojuego consiga llenar un recinto deportivo.