El armador del buque MV Cheshire, cuya carga de fertilizantes se incendió el 12 de agosto a 60 millas de Canarias, ha anunciado este domingo 3 de septiembre que el barco descargará y será reparado en un puerto de la Península, sin especificar si será español o portugués.

Esta decisión se fundamenta, sobre todo, porque Canarias carece de una planta de tratamiento de residuos como los que tiene que descargar el barco británico, que se desplazará a su nuevo destino arrastrado por los remolcadores que lo acompañan en estos momentos, después de que quedara a la deriva al ser evacuada su tripulación el pasado 14 de agosto a causa del riesgo que corría por el incendio.

El armador, la compañía Bibby Line Limited, especifica en un comunicado que a esta hora el buque ya ha empezado su viaje hacia la Península y que tardará entre seis y siete días en llegar a puerto. Está siendo remolcado por el buque Red Sea Fos a una velocidad de 5 nudos -9,2 kilómetros/hora-.

La portavoz de la compañía, Sheena Campbell Royle, añade que ayer fueron informadas las autoridades marítimas de Canarias de que el armador no tenía intención de llevar el buque en ninguno de los puertos de las islas.

Del equipo de salvamento de la compañía norteamericana Resolve Marine, contratado por el armador para recuperar al Cheshire, se quedará a bordo del Red Sea Fos el jefe del equipo, un ingeniero y dos bomberos para acompañarlo hasta su puerto de destino, y agrega que todo el resto de su personal volverá a tierra.

La portavoz subraya que Resolve Marine mantendrá informadas a las autoridades marítimas correspondientes del progreso del remolcado del buque carguero británico.

Asimismo, apunta que en la tarde de este sábado el equipo de salvamento subió a bordo una vez más para continuar con las tareas de inspección de la maquinaria del Cheshire y coger muestras de su carga.

Recuerda también que el carguero británico no emite humo desde el pasado día 25 de agosto y vuelve a insistir, una vez más, en que no hay el menor riesgo de contaminación para las aguas del archipiélago.

Con todo, el Gobierno de Canarias mantiene activo por prevención el Plan Especial de Protección Civil por Contaminación Marina (PECMAR), a pesar de que los informes que le ha transmitido la Capitanía Marítima de Las Palmas descarta cualquier peligro de contaminación o de hundimiento.

La compañía propietaria comenzó el rescate del MV Cheshire el pasado 14 de agosto cuando el barco quedó a la deriva, tras ser evacuados sus 24 tripulantes por el riesgo que corrían a causa de un incendio declarado en su carga de fertilizantes -cuya base es el nitrato de amonio- dos días antes, el 12 de agosto, cuando navegaba a unas 60 millas de Gran Canaria.

Bibby Line Limited ha agradecido a las autoridades marítimas de Canarias su "gran apoyo en todo momento durante este desafortunado incidente" y al Sasemar de Salvamento Marítimo su "gran trabajo".