Juan Manuel Brito exigió este lunes explicaciones públicas a los cargos de Podemos que, a su juicio, fueron actores principales en el proceso de expulsión seguido contra su persona. El exconsejero del Cabildo de Gran Canaria lamentó que nadie de un partido "que se dice defensor de los derechos humanos y se llena la boca con el código ético" dé la cara ante la sentencia del Juzgado de Instrucción número 9 de Las Palmas de Gran Canaria que obliga a readmitirle.

Brito, que renunció a su acta de consejero hace nueve meses, centró las críticas en Meri Pita, secretaria general de la formación morada en las Islas y hoy diputada nacional; Noemí Santana, integrante del órgano interno "que inició la trama" y hoy máxima responsable del partido en el Archipiélago, y Gloria Elizo, responsable del Comité de Derechos y Garantías que decidió su expulsión, y en estos momentos es vicepresidenta cuarta del Congreso de los Diputados.

En opinión del exconsejero insular, la decisión del juez Juan Luis Egea dista mucho de atribuir a Podemos "un error de forma", sino que, de manera "muy clarificadora", se trata de una "vulneración de derechos fundamentales". Por ello, entiende que el silencio que hasta el momento impera "retrata" al propio partido.

Por contra, fuentes del partido que dirige Pablo Iglesias, además de mostrar el "máximo respeto" por la decisión del juez, contra la que cabe recurso de apelación, señalaron que la Comisión de Garantías estatal "actúa de manera independiente".

Juan Manuel Brito explicó que en realidad la "persecución y acoso" contra su persona tenía como fin último la ruptura del pacto de estabilidad del que Podemos formaba parte en la institución insular. "De hecho yo dimití en febrero y solo un mes después se rompió el acuerdo", señaló. Además, se mostró seguro de que, a pesar del fallo judicial que le da la razón, obró con acierto al abandonar el Cabildo, ya que lo contrario habría supuesto un problema aún mayor para el Gobierno insular.

Eso en cuanto a la repercusión política de la dimisión, que podría haber sido otra pero nada habría cambiado, porque fue el desgaste personal que le ocasionó "la campaña de acoso" contra su persona y el impacto padecido por su familia lo que le convencieron de que era la senda que debía tomar. "No puedo entender la política por encima de las relaciones humanas", sentenció.

Podemos ya ha aclarado que Juan Manuel Brito no podrá optar a ocupar un cargo dentro del partido, ya que lo impide la regulación de la doble militancia acordada en Vistalegre II. Tampoco él lo desea, al menos hasta recibir unas explicaciones que parece no se van a producir. "Yo siempre he sido un activista social y poítico", recalcó y anunció que seguirá formando parte del "proyecto que Sí se puede tiene para las Islas".