El vicepresidente y consejero de Transportes, Pablo Rodríguez, reclamó ayer en el Foro Canarias conectada un pacto por la movilidad en Canarias entre las diferentes administraciones públicas y los operadores ante el modelo insostenible actual que afecta al transporte por carretera. En Canarias hay más de 700.000 vehículos privados, lo que supone una congestión de tráfico casi permanente en los grandes núcleos urbanos.

Mientras la conectividad aérea y marítima es modélica, a juicio de Rodríguez, la terrestre es "insostenible" para el futuro, por lo que se están poniendo en marcha acciones para frenar el colapso en las carreteras de las Islas. El representante del Gobierno regional criticó la falta de planificación de los municipios de las Islas cuando se peatonalizan las calles o se diseñan los enlaces, que en poco tiempo quedan saturados por el tráfico, como es el caso de los accesos a los campus universitarios en las dos islas capitalinas.

En este pacto por la movilidad el titular de Obras Públicas y Transportes incluye el nuevo convenio de carreteras con vías, como la de la Aldea, que requieren declaraciones de impacto ambiental respetuosas con el entorno natural. Pero también incrementar el número de carriles exclusivos para el transporte público en los accesos a las ciudades o la puesta en marcha del proyecto del bono residente canario, con 30 millones de euros, para que los ciudadanos utilicen más las guaguas y otros vehículos de transportes públicos para moverse en las ciudades.