La presidenta de la Cruz Roja en Lanzarote, María del Mar Romero, reconoció ayer el "cansancio" que acumulan los voluntarios que atienden el equipo de respuesta inmediata ante la llegada incesante de pateras a la isla.

El pasado miércoles arribaba una nueva patera al muelle del pueblo de La Santa, en el municipio de Tinajo, en la que viajaban 30 inmigrantes irregulares de los que dieciocho afirmaron ser menores de edad.

Romero pide "un poco más de ayuda" dado que en la actualidad Cruz Roja presta este servicio con 23 personas, que son insuficientes para la cantidad de pateras que están llegando a las costas lanzaroteñas.

El Cabildo insular decretaba este martes la situación de emergencia humanitaria ante el desbordamiento de los recursos disponibles para la acogida y alojamiento del más del centenar de menores extranjeros no acompañados que han llegado en patera recientemente a la isla.

El presidente de la primera institución, Pedro San Ginés, advirtió el pasado viernes de esta posibilidad en el caso de que el Gobierno central no atendiese a la petición del Cabildo y del Gobierno regional para la habilitación del Acuartelamiento Marqués de Herrera, en Arrecife, en donde se pretendía reubicar este grupo de menores.

Hasta ahora, todos los menores no acompañados se encuentran repartidos en las carpas de un campamento provisional de emergencia instalado en la localidad de Yaiza, en algunas viviendas tuteladas por la Consejería de Bienestar Social y en el Aula de La Naturaleza de Máguez.

Sin embargo, tras el decreto del Cabildo se ha llegado a un acuerdo con el Albergue de La Santa, que tiene capacidad para unas 120 personas y que entre 2004 y 2006, con la anterior crisis migratoria ya prestó el mismo servicio, para trasladar allí a los menores inmigrantes no acompañados, una vez se desaloje a los actuales usuarios del inmueble.El alcalde de Yaiza, Óscar Noda, remitió un escrito, antes de declararse la situación de emergencia humanitaria del Cabildo de Lanzarote, a través del cual expresaba "la preocupación del Ayuntamiento y la de vecinos del pueblo" por la acogida temporal de los inmigrantes en dos viviendas y dos carpas situadas en el municipio sureño.