Canarias ha recibido en lo que va de año 949 inmigrantes llegados a sus costas en pateras o cayucos, seis veces más que en el mismo período de 2017, cuando se contabilizaron 151. Según datos del Ministerio del Interior a 15 de octubre, desde el 1 de enero al 15 de octubre alcanzaron las costas del Archipiélago o fueron socorridas en su área de influencia 48 embarcaciones con inmigrantes irregulares, el cuádruple que el año anterior (12). En esas misma fechas el número de migrantes irregulares por vía marítima y terrestre para el total de España alcanza los 48.669, frente a los 19.134 que lo hicieron en el mismo periodo del año pasado, un 154 % más. La mayoría de los inmigrantes llegaron en patera, 43.467, una cifra que dista de la del año pasado, cuando arribaron 14.195, lo que supone un incremento del 206 %.

El número total de embarcaciones con inmigrantes que han llegado a España entre enero y mediados de octubre ha sido de 1.636, frente a las 851 del año anterior.

Con estos datos queda reflejado que el número de inmigrantes sigue en aumento y deja atrás la cifra de 2006, cuando la denominada crisis de los cayucos dejó solo en Canarias casi 32.000 personas.

Propuesta

Precisamente ayer el Parlamento reclamó ayer al Estado la mejora del Sistema de Vigilancia Exterior (SIVE) en Lanzarote. Todos los grupos con presencia en la Cámara canaria apoyaron la proposición no de ley (PNL) presentada por Coalición Canaria (CC) para corregir las zonas que escapan a la cobertura del sistema en la isla de los volcanes, especialmente en el norte, para evitar que las pateras arriben a la costa sin ser avistadas antes.

La iniciativa fue presentada en mayo por el grupo nacionalista, que expuso que desde entonces ya se percibía un aumento en la llegada de embarcaciones de forma clandestina sin que el sistema funcionara bien. Esta situación, advirtió, "pone en riesgo" la vida de las personas que van a bordo de las pateras.

Todos los grupos parlamentarios coincidieron en la necesidad de mejorar el sistema de vigilancia, más aún tras conocer que el contrato para el mantenimiento de este servicio no se renovó el pasado año.

El PSOE, pese a dar su apoyo a esta iniciativa, aseguró que en CC no se ha despertado una preocupación por el fenómeno de la inmigración ilegal por cuestiones humanitarias, sino que ha tenido una "reacción populista" para buscar "el voto del miedo" en los próximos comicios. Los socialistas insistieron, a su vez, en que la decadencia del SIVE responde a los "brutales recortes del Partido Popular (PP)". Tanto Nueva Canarias (NC) como Podemos coincidieron en advertir de los peligros de generar alarma social y PP y Agrupación Socialista Gomera (ASG) apremiaron al Estado a subsanar esta situación.